Fuente: Télam
Unos 35 millones de argentinos podrán elegir mañana un nuevo Gobierno en una compulsa con cinco candidatos presidenciales, con el antecedente del escenario de paridad entre los primeros tres postulantes registrado en las PASO y en un clima de expectativa alrededor de si será necesario o no el balotaje para definir al próximo jefe de Estado.
A un día de la votación que definirá quiénes serán los sucesores de Alberto Fernández y de Cristina Fernández de Kirchner, la atención está puesta en cuánto respaldo en las urnas lograrán Sergio Massa (UxP), Javier Milei (LLA), Patricia Bullrich (JxC), Myriam Bregman (Frente de Izquierda y los Trabajadores-Unidad, FIT-U) y Juan Schiaretti (Hacemos por Nuestro País, (HpNP).
Es que, de acuerdo a cuáles sean los resultados, la Argentina podría elegir a su próximo Presidente en la segunda vuelta, programada para el 19 de noviembre.
Así lo establece la ley electoral en caso de que este domingo ningún postulante alcance el 45% de los votos o ante la posibilidad de que el candidato más votado supere los 40 puntos pero no logre un 10% de diferencia con el que salió segundo.
Si así fuese se trataría de la segunda vez en la historia del país en que un mandatario resulta electo en segunda vuelta: sólo ocurrió en el 2015, cuando Mauricio Macri terminó imponiéndose sobre Daniel Scioli.
En las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) de agosto último, Milei obtuvo el 29,8% de los sufragios, Bullrich sumó 28% (con la suma de los votos de su contrincante en la interna Horacio Rodríguez Larreta) y Massa alcanzó el 27,2% (con los apoyos recibidos por Juan Grabois).
Muy lejos se posicionaron las otras dos fuerzas que superaron el piso del 1,5% necesario para competir en las generales: Schiaretti logró 3,71 puntos y Bregman se quedó con un 2,61%.
Esta semana, poco antes de la veda electoral que se inició ayer, los partidos y frentes pusieron punto final a sus actividades de campaña, tras una intensa actividad proselitista desarrollada en todo el país -en algo más de dos meses luego de las PASO-, que incluyó dos debates obligatorios entre los cinco aspirantes a la Casa Rosada.
“Este domingo te pido que vayas a buscar la bandera argentina al cuarto oscuro” pidió Massa en una fábrica junto a trabajadores, docentes y jubilados del partido bonaerense de Pilar, el lugar que eligió el jueves último para su acto de cierre de campaña.
Allí volvió a convocar a sellar un “nuevo pacto federal” y advirtió sobre qué se pone en juego en los comicios de mañana: “Decidimos si elegimos un país que defienda su proyecto de desarrollo con convicción frente al Fondo Monetario Internacional (FMI) o si vamos de rodillas al almacén, con el manual del almacenero, a rendirnos y a hacer lo que nos impongan”.
También el jueves pasado, Bullrich le puso punto final a sus actividades proselitistas en la plaza Raúl Alfonsín del municipio bonaerense de Lomas de Zamora, acompañada por el expresidente Mauricio Macri y por el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta.
“Esta es la anteúltima estación porque la última es el 19 de noviembre ganando el balotaje por la Presidencia. O en primera vuelta, quizás”, se envalentonó la exministra de Seguridad de Macri, en un discurso en el que volvió a convocar a “sacar al kirchnerismo de raíz” y a advertir que “son malas y peligrosas las ideas de Milei”.
En contraste con sus principales adversarios, el postulante presidencial libertario optó por un acto en el Movistar Arena, en el barrio porteño de Villa Crespo, donde planteó que las de mañana “son las elecciones más importantes de los últimos 100 años”, pero luego se corrigió: “Si me permiten editar, 107 (años)”, en alusión al 1916, año en que asumió la Presidencia el radical Hipólito Irigoyen.
Además de pronosticar que LLA puede “ganar en primera vuelta”, Milei concluyó: “Posiblemente hemos pasado el desierto de 40 años para llegar a la libertad”, en una expresión que pareció dirigida a denostar las cuatro décadas de experiencia democrática, tras la última dictadura militar.
Bregman, en tanto, puso fin a la campaña en la plaza San Martín de La Plata, donde reafirmó su pedido a la ciudadanía para que “vote con convicción” y argumentó: “No se puede votar ni a salvadores individuales ni con la nariz tapada”.
“No se queden masticando bronca en sus casas porque así no va a cambiar nada; lo importante es que se manifiesten, se expresen y yo llamo a que voten con valores y convicciones”, declaró.
El aspirante presidencial cordobés, Schiaretti, encabezó un acto en el polideportivo Quality, de la capital mediterránea, donde aseguró que, en caso de asumir el Gobierno, le pondrá fin al cepo al dólar y desdoblará temporalmente “el tipo de cambio para que haya uno comercial, que sea competitivo, y otro libre para quienes quieran comprar y lo hagan legalmente y no terminen en una cueva”.
Entre sus principales medidas también anunció que, para “sacarle el pie de encima al campo”, desde el 10 de diciembre, va a “reducir a la mitad las retenciones a la producción agropecuaria y a fines del 2024 no habrá más retenciones”.
Además de Presidente y Vicepresidente, mañana se elegirán 130 diputados nacionales, 24 senadores nacionales en ocho provincias, 19 parlamentarios del Mercosur por distrito nacional y 24 parlamentarios del Mercosur por distrito regional.
Como sucede cada dos años, el electorado deberá votar para renovar la mitad de la Cámara de Diputados (130 bancas) y un tercio del Senado (en esta oportunidad las 24 bancas que representan a Buenos Aires, Formosa, Jujuy, La Rioja, Misiones, San Juan, San Luis y Santa Cruz).
Si se repitieran los resultados de las PASO, las proyecciones indican que ninguna fuerza política lograría tener quórum propio en ambas cámaras (se necesitan 129 escaños en Diputados y 37 en el Senado).
También habrá comicios para elegir gobernador y otras categorías provinciales y municipales en Buenos Aires, Catamarca y Entre Ríos; jefe de Gobierno y diputados porteños en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, además de cargos municipales en Santa Cruz, Córdoba, Río Negro y Neuquén.
El foco estará puesto en los resultados en la provincia de Buenos Aires, con algo más de 13 millones de personas, que representa el 37% del padrón electoral, seguida por Córdoba, Santa Fe y CABA.
Buenos Aires pone en juego 35 escaños en la cámara baja (además de las tres del Senado); CABA, 12; Córdoba nueve y Santa Fe 10.
Los distritos de Mendoza y Tucumán renuevan cinco bancas en la cámara baja nacional; Misiones, Corrientes, Salta, Santiago del Estero y Entre Ríos, cuatro; Chaco, Chubut, Formosa, Jujuy, La Rioja, Río Negro, San Juan y Tierra del Fuego, tres; y Santa Cruz, San Luis, Neuquén, La Pampa y Catamarca, dos.
En la Ciudad de Buenos Aires, la pelea por suceder a Horacio Rodríguez Larreta en el Gobierno también concentrará la atención el domingo, en una disputa que enfrenta a Jorge Macri (JxC), Leandro Santoro (UxP), Ramiro Marra (LLA) y Vanina Biasi (FIT-U).
Para estas elecciones habrá 113.410 mesas electorales dispuestas a lo largo y ancho del país.