Victoria, una beba de Río Tercero, fue trasplantada con éxito en el Sanatorio Allende. Su madre fue la donante y el caso conmovió por el gesto de amor y la solidaridad recibida.
Victoria, una beba de apenas cinco meses oriunda de la ciudad de Río Tercero, fue sometida con éxito a un trasplante hepático con donante vivo en el Sanatorio Allende de Córdoba, luego de ser diagnosticada con una grave enfermedad congénita.
La intervención, realizada el pasado martes 17 de junio, fue posible gracias a la donación de parte del hígado de su madre, Guadalupe Accotto, en un gesto de profundo amor y entrega que conmovió a toda la comunidad.
La pequeña —a quien su familia llama afectuosamente “Vicky”— fue diagnosticada al mes de vida con atresia de vías biliares tipo 3, una patología que obstruye los conductos encargados de transportar la bilis desde el hígado hacia el intestino. Esta enfermedad, de no ser tratada a tiempo, puede generar un daño hepático irreversible. Luego de varios episodios de colangitis aguda, los médicos indicaron la necesidad urgente de un trasplante.
El procedimiento se llevó a cabo en el Sanatorio Allende, uno de los centros de alta complejidad más reconocidos de la provincia, mediante un trasplante hepático con donante vivo relacionado, técnica cada vez más utilizada en medicina pediátrica por su alta efectividad. En este caso, la donante fue su madre, en una intervención considerada de alto riesgo.
Actualmente, Victoria permanece internada bajo monitoreo intensivo, y según informaron los profesionales que la asisten, su evolución clínica es favorable.
Acompañamiento y agradecimiento
El padre de la niña, Gonzalo, expresó su agradecimiento a la obra social OSPRERA, que cubrió el 100% de los costos del procedimiento. “Nos sentimos contenidos desde el primer día. No sólo cubrieron todos los gastos, sino que nos brindaron una atención humana y cálida que marcó la diferencia”, señaló en declaraciones difundidas por medios locales.
La historia de Victoria se viralizó rápidamente en redes sociales, donde cientos de personas expresaron mensajes de apoyo, admiración y aliento a la familia. El gesto de la madre fue especialmente destacado como símbolo de amor incondicional.
La familia continúa enfocada en la recuperación de la pequeña, con la esperanza de que pronto pueda regresar a su hogar en Río Tercero. Mientras tanto, agradecen las muestras de cariño recibidas y subrayan la importancia de visibilizar la donación de órganos, especialmente en casos pediátricos complejos.
