Cumplidos 16 años desde la aprobación y puesta en vigencia de la Carta Orgánica Municipal, el espacio Ciudad Futura se propuso comenzar a instalar la necesidad de realizar una reforma integral.
Es que, aprobada en noviembre de 2007, la COM comenzó a regir la vida institucional del gobierno de Villa Carlos Paz en enero siguiente y, por lo tanto, ya tiene un recorrido suficiente como para poder realizar un balance.
En este sentido, la primera actividad se llevó a cabo el pasado jueves 23 de mayo, y consistió en una charla-debate de la que participaron ex convencionales constituyentes de diferentes espacios políticos: Blanca Pérez (PJ), Raúl Bonadero y Omar Ruiz (Participación y Cambio), y Oscar Di Vico (UCR).
Tras la presentación a cargo del exconcejal Adrián Lizarriturri, Pérez, Bonadero, Ruiz y Di Vico reflexionaron sobre sus vivencias durante la convención constituyente, y dejaron sus impresiones sobre el devenir de la Carta Orgánica.

Hubo coincidencia en que, más allá de las ‘buenas intenciones’ que se haya podido tener al momento de su elaboración, la aplicación siempre depende de la voluntad del poder político.
Se repasaron algunos organismos previstos que nunca se pusieron en marcha como el Ente de Control de Servicios Públicos y la defensoría de Oficio, y otros que funcionaron de manera intermitente con escasos resultados como el Consejo Educativo Municipal y el Consejo de Partidos Políticos.
Mención especial para el Auditor de Gestión que, a partir de la falta de diálogo y acuerdo en el Concejo de Representantes, es un cargo que está vacante.
‘La Carta Orgánica se fue achicando a medida que Avilés achicó el gobierno’, se dijo.
Temas como la cláusula de gobernabilidad que le garantiza a quien gana la elección (independientemente de la diferencia o el porcentaje de votos) una mayoría automática en el Concejo de Representantes, y la posibilidad de incorporar unas PASO a nivel municipal, también aparecen en la lista de lo que debe ser revisado.
Entonces, la idea es comenzar a trabajar a mediano y largo plazo en una reforma integral, buscando acuerdos y generando un escenario político y social para convocar a una nueva convención constituyente.
La defensoría del Pueblo, en la mira
Por peso propio, cuando se habla de falencias de la Carta Orgánica lo primero que surge automáticamente es la defensoría del Pueblo.
Una institución que es cabal ejemplo de las ‘buenas intenciones’ de los convencionales constituyentes y que, en la práctica, poco y nada tiene que ver con esas expectativas.
Tras la primera gestión de Alejandro Luchessi (UCR), quien tuvo que armar toda la estructura desde cero y sentar las bases de funcionamiento, el organismo fue cooptado por el oficialismo, primero con Daniel Mowszet y actualmente con Víctor Curvino, transformándose en un brazo más del proyecto político que gobierna la ciudad. Todo lo contrario del objetivo original.
Este declive de credibilidad se reflejó en la paupérrima participación ciudadana en la última elección, cuando apenas el 25% del padrón concurrió a votar.

Teniendo en cuenta, además, el abultado presupuesto que se gasta principalmente en sueldos (más de mil millones de pesos en cuatro años), lo que se propone es directamente eliminarla para que ya en 2025 no se realice la elección, y el organismo se cierre una vez que Curvino concluya su mandato, a fines del año próximo.
Para eso se intenta apelar a la reforma por enmienda prevista en la Carta Orgánica y que permite modificar hasta dos artículos a través de una ordenanza aprobada con mayoría extraordinaria (10 votos de 12 con la actual conformación) y validada por un referéndum obligatorio.
‘El defensor del Pueblo no tiene razón de ser, y nos cuesta mil millones de pesos en cuatro años. Es un proceso agotado’, sentenció Ruiz.
Para impulsar la enmienda que elimine el artículo que crea la defensoría del Pueblo, se analiza presentar el proyecto a través de la Banca del Ciudadano o ingresarlo directamente al Concejo de Representantes para, al menos, motorizar la discusión y que los distintos espacios políticos fijen postura.
Ruiz: ‘Hay que salir de la apatía y recuperar la participación ciudadana’
El exconcejal y ex convencional constituyente, Omar Ruiz, reconoció que, si bien hablar de una reforma de la Carta Orgánica ‘no es prioridad en la vida cotidiana de la gente’ en el marco de la crisis económica nacional, ‘la intención de Ciudad Futura al abrir este debate es vincular temas que a prima facie pueden aparecer como abstractos o que solo incumben a unos pocos, pero que tienen una incidencia muy directa en el bolsillo y en la vida diaria’.

‘A 16 años de la sanción de la COM hay que hacer un balance y determinar qué cosas funcionaron bien, cuáles a medias y cuáles no funcionaron’, dijo en una entrevista con VillaNos Radio. Y adelantó que, ‘la idea es ir involucrando progresivamente a otras instituciones, partidos políticos y al vecino común’.
‘Hay que salir de esta apatía para recuperar la participación ciudadana y empoderamiento de la sociedad para nuevos cambios’, opinó.
Nota correspondiente a la edición n° 599 del periódico La Jornada, del 29 de mayo de 2024.
Una pena pensar en eliminar la defensoría , una herramienta que bien usada sería muy beneficiosa para el pueblo . El candidato de la primer minoría y si este no quisiera , el candidato de la segunda y así . Ver de modificar en la COM la antidemocrática mayoría simple alegando la gobernabilidad