El ex rector de la Universidad Nacional de Río Cuarto y segundo candidato a diputado nacional por Defendamos Córdoba analizó el escenario político y económico actual, defendió la construcción del nuevo espacio encabezado por Natalia de la Sota y cuestionó con dureza al gobierno nacional de Javier Milei.
En diálogo con VillaNos Radio, el ex rector de la Universidad Nacional de Río Cuarto y actual candidato a diputado nacional por Defendamos Córdoba, Marcelo Ruiz, trazó un análisis crítico del contexto político y económico del país.
“Estamos presenciando el ejercicio de la irresponsabilidad y la pedagogía de la crueldad del gobierno de La Libertad Avanza”, afirmó al inicio de la entrevista.
Ajuste, educación y violencia institucional
Desde su experiencia como ex rector universitario, Ruiz advirtió sobre el impacto del ajuste en el sistema educativo y en las instituciones públicas.
“El mapa de las múltiples vulnerabilidades en la población, producto del brutal ajuste de Javier Milei —no contra la casta, sino contra el pueblo— nos va dejando estos escenarios: pauperización de trabajadores, de jubilados, y desfinanciamiento de instituciones educativas y de salud”, sostuvo.
También denunció la suspensión por decreto de leyes aprobadas, como la de financiamiento universitario y la de emergencia en salud pediátrica. “El Congreso promulga las leyes, el gobierno las veta, el congreso insiste, entonces luego las promulga pero las suspende por decreto. Es una forma de negar la ley, de vaciar el lenguaje normativo de su sentido.”
Y dejó una definición política de fondo: “Milei no vino a destruir el Estado. Vino a ejercer violencia desde el Estado contra los sectores más vulnerables.”
El armado de Defendamos Córdoba
Consultado sobre el surgimiento del nuevo espacio encabezado por Natalia de la Sota, Ruiz explicó que la decisión implicó tomar distancia del bloque del cordobesismo, al que acusó de haber acompañado las leyes de Milei desde el comienzo.
“Si hubiéramos tenido una Cámara con pensamiento crítico, hoy no estaríamos en esta situación de maltrato social. El cordobesismo dio sus votos para la ley Bases y los superpoderes”, afirmó.
Aclaró que su vínculo con De la Sota no proviene de una historia política compartida, pero valoró su coherencia al diferenciarse del bloque mayoritario: “La coherencia a veces implica tomar distancia. Y eso fue lo que valoramos.”
Ruiz reivindicó el proyecto como un intento genuino de construir una alternativa de largo plazo, más allá del resultado electoral. “La constitución de una opción electoral es importante, pero lo que queremos es habitar instancias de participación del pueblo, desde un centro de salud hasta una universidad o un club de barrio.”
“No estamos jugando solo por una banca. Queremos consolidar una identidad política con vocación federal y mirada a futuro.”
Críticas al “pensamiento único” y a la narrativa oficial
El candidato rechazó las etiquetas que intentan ubicar a Defendamos Córdoba dentro de espacios ya conocidos como el mismo kirchnerismo o el cordobesismo: “Reivindicamos nuestra autonomía, nuestra construcción desde Córdoba, con mirada federal.”
Además, criticó la lógica binaria del oficialismo nacional: “Cuando Milei dice ‘La libertad avanza o la Argentina retrocede’, lo que hace es rechazar la diversidad y plantear el pensamiento único. Es la antítesis de una democracia plural.”
Expectativas electorales y fiscalización
De cara al tramo final de la campaña, Ruiz se mostró optimista y destacó la pluralidad de voces que integran su lista.
“Representamos a sectores de la agricultura familiar, de las pymes, de la educación, del sindicalismo, de la discapacidad. Hay una textura diversa que intenta reflejar al pueblo cordobés.”
También subrayó la importancia de la fiscalización ante la gran cantidad de listas en competencia y el uso de la boleta única. “Estamos dedicados a hacer pedagogía sobre cómo se vota. Es clave que el ciudadano llegue con claridad al cuarto oscuro.”
Una apuesta de futuro
Cerrando el diálogo, Ruiz enfatizó que Defendamos Córdoba no se reduce a una estrategia electoral, sino a un proyecto político con vocación de continuidad.
“El camino es de mediano y largo plazo. No está todo escrito: hay mucho por construir y hay que hacerlo de manera colectiva”, concluyó.