El Tribunal Penal de El Cairo ratificó la pena de muerte impuesta al derrocado presidente egipcio y casi un centenar de islamistas por organizar su fuga de una cárcel de las afueras de El Cairo durante la revolución de 2011.
El juez Shaaban al Shami emitió su fallo firme en este caso, luego de recibir la opinión no vinculante del mufti Shauqi Alam, máxima autoridad religiosa musulmana de Egipto, sobre las penas capitales dictadas hace un mes de forma provisional, paso contemplado por la ley.
Otros dirigentes de los Hermanos Musulmanes sentenciados a muerte en esta causa son su guía espiritual, Mohamed Badie, y el presidente y el vicepresidente del brazo político de la cofradía, el Partido Libertad y Justicia, Saad Katatni y Esam al Arian, respectivamente, informaron las agencias de noticias EFE y Europa Press.
La ley prevé que ambos veredictos pueden ser apelados.
Previamente a conocerse este fallo, el tribunal había condenado a cadena perpetua a Mursi y a Badie, al igual que a otros 15 altos cargos de los Hermanos Musulmanes, acusados de conspiración con grupos extranjeros, en referencia a Hamas, Hezbolá y la Guardia Revolucionaria iraní.
Télam
