A casi 19 años del crimen de Nora Dalmasso en Río Cuarto, el juez Diego Ortiz rechazó la prescripción de la causa y habilitó un juicio por la verdad contra Roberto Bárzola, cuyo perfil genético fue identificado en pruebas clave. La investigación continúa activa para esclarecer el femicidio.
La causa por el asesinato de Nora Dalmasso, ocurrido en noviembre de 2006 en el barrio Villa Golf de Río Cuarto, Córdoba, ha dado un nuevo giro judicial. El juez de Control y Faltas, Diego Ortiz, rechazó el pedido de prescripción presentado por la defensa del principal sospechoso, Roberto Marcos Bárzola, y ordenó que la causa se mantenga “activa y abierta” para avanzar en un juicio por la verdad.
Bárzola, un parquetista de 45 años que trabajó en la casa de la familia Macarrón-Dalmasso, fue vinculado nuevamente a la investigación luego de que análisis genéticos identificaran su ADN en la bata con la que se ahorcó a la víctima y en un vello púbico hallado en su cuerpo. Aunque había declarado como testigo en 2006, nunca fue imputado hasta diciembre de 2024, cuando el fiscal Pablo Jávega lo acusó formalmente de abuso sexual seguido de muerte.
La defensa de Bárzola solicitó la prescripción del caso, argumentando el tiempo transcurrido desde el crimen. Sin embargo, el juez Ortiz consideró que “el deber de investigar debe cumplirse con seriedad y no como una simple formalidad”, y que declarar la prescripción “implicaría el cierre definitivo de un proceso penal en el que aún no se ha alcanzado la total averiguación de la verdad real de lo sucedido”.
El juicio por la verdad es una instancia judicial que, aunque no conlleva una condena penal, permite reconstruir los hechos y establecer responsabilidades, especialmente en casos donde se han vulnerado derechos humanos. El magistrado habilitó a las partes a proponer nuevas pruebas para avanzar en el esclarecimiento del caso.
La familia de Nora Dalmasso, a través de su abogada Mariángeles Mussolini, expresó que esta decisión representa “un primer paso importante”, pero advirtió que “la impunidad no puede triunfar” y que se necesita una condena penal para que se haga justicia.
El caso Dalmasso ha sido uno de los más resonantes de la historia judicial argentina reciente. En 2022, el viudo de la víctima, Marcelo Macarrón, fue absuelto por un jurado popular al no encontrarse pruebas suficientes en su contra. Ahora, con la reapertura de la investigación y el foco puesto en Bárzola, la Justicia busca finalmente esclarecer el crimen que conmocionó al país.