Reconoce a su atacante, que habría abusado a más mujeres. Le negaron botón antipánico y la policía incumple patrullaje prometido
La justicia de Córdoba trabaja en la investigación de un total de seis casos de abuso sexual, producidos con pocos meses de diferencia. Apuntando a un violador serial, que podría tener vínculos con la Policía (un agente de La Calera presuntamente habría intentado persuadir a una víctima para que no hiciera la denuncia), las tareas son amplias y contundentes.
Pero el relato de una valiente joven, víctima de quien habría perpetrado los ataques, es tremendo. El caso se remonta al 21 de diciembre pasado, cuando declaró tener certezas de quien fue su atacante, a quien conoció por un vínculo familiar algunos años antes. Los datos aportados son contundentes y una persona cercana le confirmó que “trabajó en el Tiro Federal” y que “tiene vínculos con la policía”. Hoy está prófugo.
El gancho inicial fue el hecho de que la joven publicara su teléfono en las redes sociales, anunciando que buscaba trabajo. Así fue contactada por quien terminaría siendo su atacante, primero para ofrecerle empleo “como promotora” y con posterioridad con el nombre falso de una mujer, que le pidió que “cuidara a su hija”.
En una entrevista con el programa Cara y Cruz, de radio Universidad, la joven -identificada con el seudónimo de María-, brindó las mismas precisiones que en su declaración ante la justicia. “Por buscar trabajo me pasan estas cosas” se lamentó, agregando que le quedó “ese miedo”, que ya no confía tanto en las personas y que hasta sueña con su atacante.
Hoy, para ir a una entrevista laboral, dice tomar más precauciones, y recuerda su único pedido a las autoridades: “Que lo encuentren, que lo busquen por cielo y tierra”. Mostró, a su vez, cierta apatía con la justicia: “Pedí el botón antipánico y me lo negaron porque ‘es para víctimas de violencia de género’. También pedí que patrullen cerca de casa y la policía fue una vez y nunca más”.
