El Concejo de Representantes sancionó el jueves pasado una ordenanza que tiene por objeto “la eliminación de la entrega de bolsas descartables, denominadas bolsas camisetas, para el acarreo de mercaderías desde la línea de caja en los locales comerciales”, incluyendo autoservicios, minimercados y supermercados.
Se establece un período de transición de un año entre la promulgación y el de su efectiva implementación. En este lapso, los comercios alcanzados deberán implementar las siguientes medidas para lograr un proceso de reducción gradual de la entrega de bolsas descartables:
- a) Ofrecer como producto de góndola a sus clientes bolsas reutilizables (…) y/u otros elementos reutilizables que cumplan las mismas funciones.
- b) Habilitar todos los días del periodo de transición la denominada Caja Verde, esta no entregará bolsas descartables a los clientes. Los comercios deberán mantener un 70 % de las cajas en funcionamiento con esta modalidad de caja verde, en los casos de comercios de menor envergadura que solo tenga dos cajas habilitadas deberán mantener el 50% de cajas verdes, en el caso de los comercios que solo posean una sola caja de cobro, quedara prohibido desde el primer día de promulgada esta ordenanza la entrega de bolsas descartables.
- c) Exhibir cartelería que forme parte de la campaña de difusión así como la cartelería que identifique las cajas verdes.
Quedan exceptuadas de esta prohibición, por cuestiones de asepsia, el uso de bolsas de polietileno para contener alimentos o insumos húmedos que no estén previamente envasados como, pescados carne vacuna o aves y sus derivados, lácteos, hielo, congelados, comidas elaboradas frías o calientes.
Quienes incumplan estas disposiciones serán sancionados con multas de hasta 5 mil pesos, o clausura e inhabilitación del comercio infractor.
La iniciativa había sido presentada en junio de 2016 por el concejal Gustavo Molina (Frente Cívico), con el acompañamiento de Carla Livelli (CPU) en calidad de coautora.
En la sesión del jueves fue aprobada por mayoría. Molina, Walter Gispert, Oscar Sequeira, Laura Orce, Natalia Lenci y Omar Ruiz votaron a favor. Alejandra Roldán, Soledad Zacarías, Hugo Bustos, Mirtha Alessio y (curiosamente) Livelli, lo hicieron en contra. Estuvo ausente Marcelo Cuevas.
“Estamos a favor del ambiente. Redundan los fundamentos para decir que tenemos que ir hacia la eliminación progresiva y total de las bolsas que nos dan cuando hacemos las compras. La ordenanza tiende a eliminar este tipo de prácticas. Es una forma de aportar a un ambiente sano y una ciudad saludable”, argumentó Molina desde su banca. Y subrayó que también pretenden evitar “que se tapen los desagües, la contaminación masiva que provoca el nylon en el ambiente, y hacerle más miserable la vida a los vecinos que viven en las periferias y tienen que convivir con las bolsas en los bosques y montes”.
Tras la sanción de la ordenanza, Molina subió un video a su perfil de Facebook donde muestra “imágenes de lo que no queremos”. Bolsas de plástico desparramadas en el monte forman parte de este desagradable escenario.
“Buscamos mejorar la calidad de ambiente y dejar de afear la ciudad, sobre todo en aquellos sectores populares. Por eso, cuando el intendente promulgue esta ordenanza no tendremos más este panorama en la ciudad”, señaló.
Sin embargo, y teniendo en cuenta el explícito rechazo del oficialismo, no se descarta que Avilés vete la ordenanza para impedir su aplicación. En ese caso, para insistir con la ordenanza el cuerpo legislativo deberá volver a aprobarlo “por mayoría absoluta” (más de la mitad del total de los miembros). Con el bloque oficialista completo, es decir sin ninguna ausencia como la de Cuevas el jueves pasado, el objetivo parece complicado de lograr, ya que siempre existe el doble voto de la presidencia para desempatar.
Nota correspondiente a la edición n° 479 del semanario La Jornada, del 20 de agosto de 2017.
“imágenes de lo que no queremos” incluye a Molina o solo es por la basura????
Lo que pone en evidencia (como si hiciera falta!) el representante Molina es una realidad que debería avergonzar a los funcionarios que presumen gestionar la segunda ciudad turística del país. No entiendo por qué es tan difícil que la sociedad de Carlos Paz asuma su responsabilidad en la problemática de la basura. Otros municipios, como Cosquín y Villa General Belgrano, han puesto en vigencia hace mucho normativas para la eliminación de bolsas plásticas y aquí parece que nadie quiere hacerlo… ni les interesa. Por otra parte sobran los inadaptados que fabrican basurales allí donde pueden de la noche a la mañana. Y después quieren vivir del turista. Que triste.
Sr. Avilés, póngase los pantalones en este tema y promulgue la ordenanza.