El 11 de marzo de 2015 en horas de la siesta, Andrea Castana dejó a sus hijos en el colegio y se encaminó a subir el Cerro de La Cruz. Llegó a la cima y cuando emprendía el regreso fue interceptada, violada y asesinada.
Su cuerpo fue hallado dos días después, el 13 de marzo durante una desesperada búsqueda de la que participaban fuerzas de seguridad, familiares, amigos y vecinos. A un año de este episodio, el crimen sigue sin resolverse y no hay pistas firmes.
“No hubo un avance que nos pueda determinar o dar una nueva hipótesis para seguir”, reconoció el abogado de la familia, Facundo Pace. “No hay muchas pistas fundamentales. La fiscalía sigue trabajando sobre la hipótesis de un ataque sexual, pero lamentablemente no tenemos indicios sobre quién puede haber sido”, añadió.
La causa tiene cuatro imputados: su exmarido, Juan Manuel Lazzaroni, acusado de homicidio agravado por el vínculo y abuso sexual; Diego Luján y Fernando Villa, acusados de encubrimiento agravado. Cabe recordar que Luján colaboró en la búsqueda de Andrea y Villa fue quien dio aviso a la Policía al escuchar un grito en el Cerro.
Por otro lado, está acusado de homicidio agravado, abuso sexual y robo Omar González. Este hombre fue detenido en junio del año pasado por otro hecho. Al contar con “frondosos antecedentes” –al decir de la fiscal general adjunta Alejandra Hillman- fue vinculado con la causa. Sin embargo ninguno de los cotejos genéticos de los acusados coincide con los restos encontrados en la escena del crimen.
“Todas las pruebas han dicho que estas personas no tienen nada que ver”, dijo Pace.
Cabe recordar que la investigación del caso fue iniciada por el fiscal Ricardo Mazzuchi, pero luego pasó a manos de Hillman. Según relatan las amigas de Andrea, a ocho meses del episodio (en el mes de noviembre) se cambió el equipo técnico que lleva adelante la investigación. Al parecer, la resolución fue tomada por el fiscal general de la provincia, Alejandro Moyano. Las amigas confían en que este nuevo equipo logrará esclarecer el crimen de Andrea.
Sin embargo, Pace no oculta la frustración de que haya pasado un año y no se tengan pistas para encontrar al o los culpables del crimen de Andrea. “Nosotros pensamos que íbamos a tener un hallazgo. El caso daba para que la resolución sea rápida al principio. Pero no pasó. Es una gran frustración de parte nuestra y entiendo que desde la fiscalía también.
“Siempre que no se encuentran los resultados, la fiscalía es fuente de crítica. Puede ser un tema de enfoques, como por ejemplo, el hecho de no proteger la escena del crimen. Pero también es cierto lo que decía el fiscal Mazzuchi de que en ese momento se estaba buscando un cuerpo con vida”, dijo Pace.
Y concluyó: “Yo he notado que han trabajado. Pero no han logrado el objetivo que se propusieron”.
Nota correspondiente a la edición n° 408 del semanario La Jornada, del 13 de marzo de 2015.
