Una selfie compartida en las redes sociales por una empleada de la municipalidad de Villa Carlos Paz que se desempeña en el Centro de Monitoreo de las cámaras de videovigilancia vuelve a instalar el debate sobre si el sistema invade la privacidad de los vecinos.
Quienes aceptan trabajar en dicha área firman un acuerdo de confidencialidad respecto a las imágenes y datos que surgen de las 40 cámaras distribuidas en puntos estratégicos de la ciudad. En teoría, tampoco se pueden utilizar celulares dentro de la dependencia para evitar filtraciones.
Sin embargo, el hecho de que se tomen fotografías personales en el interior del centro de videovigilancia ubicado en la municipalidad no hace más que dar sustento a dudas y sospechas respecto del uso que se le pueda dar a esa información.
