El concejal Oscar Sequeira (Frente Cívico) denunció que el intendente Esteban Avilés “no quiere ser controlado”, y le pidió a los vecinos que “no se aferren a slogans” como el de ‘Gestión Comunitaria’.
El edil advirtió que, en la última sesión del cuerpo legislativo, el oficialismo introdujo “drásticos cambios” en la comisión de Control de Balnearios.
“Se derogó la ordenanza 5630 y sus modificatorias (5669 y 5841) para sacar del medio a los centros vecinales de la Comisión Administrativa, donde solo quedan representantes del Departamento Ejecutivo.
Esa comisión es la que tiene como función supervisar las acciones del gobierno municipal. No tiene supervisión externa”, subrayó.
Entre las acciones de esta Comisión Administrativa se destaca la celebración de convenios “los cuales quieren autorizar por decreto del ejecutivo sin ningún tipo de control ni objeción”.
“Antes debían tener un quórum de la mitad más uno de sus miembros (de los 7, 3 eran representantes de centros vecinales) y las decisiones se tomaban por mayoría de los presentes, entre ellos los centros vecinales que contaban con voz y voto y se llevaba un libro de actas firmado por los miembros de cada reunión. Con la ordenanza actual ese libro ya no existe. No hay constancia de lo que sucede en las reuniones. No hay más control social”, insistió.
Otra modificación importante tiene que ver con que, antes, tenían prioridad de trabajo los vecinos del barrio y ahora “los elije el ejecutivo a dedo”.
“Al parecer empezamos el período electoral y necesitamos espacio para clientelismo político”, dijo Sequeira.
Por otro lado, planteó que desde el Frente Cívico “llevamos dos años intentando, sin éxito, que se trate el plan anual que presenta regularmente el Auditor de Gestión del Concejo de Representantes, Alejandro Díaz”.
Además, “no se aprueba ningún pedido de informe que vaya dirigido al departamento ejecutivo”.
“La mayoría ni siquiera se trata en comisión”, se quejó.
En diálogo con VillaNos Radio Sequeira recordó que el avilesismo también puso escollos para la sanción de la ordenanza sobre Acceso a la Información Pública, y que bloqueó el tratamiento de un proyecto para que los funcionarios deban rendir cuentas cuando salían de la provincia en gestión oficial.
“Se habla de gestión comunitaria y de diálogo pero en la práctica es otra cosa. Y esto impacta en los vecinos, como en el tema del transporte urbano que venimos pidiendo que nos informen desde el año pasado cuántas unidades adaptadas hay, y todavía no tenemos respuestas”, aseguró.
“La realidad es que desde 2015 a la fecha hay cada vez menos participación, menor control y la oposición está encapsulada. Esto daña lo institucional”, expresó.
Por último, Sequeira envió un mensaje a los vecinos: “no nos aferremos a slogans, veamos en los hechos lo que está pasando. No hay que comerse el amague de la gestión comunitaria”.
