El proyecto que planteaba la suspensión parcial de la ordenanza que prohíbe el tránsito dentro de Villa Carlos Paz de los colectivos de gran porte destinados al turismo de grupo no logró el respaldo necesario para ser tratado sobre tablas en la sesión del jueves pasado del Concejo de Representantes y pasó a comisión.
La iniciativa, presentada con las firmas de Walter Gispert, Gustavo Molina y Oscar Sequeira (Frente Cívico) y Natalia Lenci (UCR), sumó el acompañamiento de Omar Ruiz (CPU) pero igual no alanzó, ya que el bloque avilescista (Alejandra Roldán, Mirtha Alessio, Hugo Bustos, Carla Livelli y Soledad Zacarías) se opuso, al igual que Laura Orce (UpC) y Marcelo Cuevas (PRO).
Cabe recordar que la propuesta preveía, además, convocar de manera inmediata a todos los actores y/o partícipes necesarios que se ven afectados por la Ordenanza Nº 4325/04 y sus modificatorias, y por la suspensión de los artículos antes mencionados para que juntos se puede llegar a una reglamentación en consenso, que sea viable, que proteja los derechos de los vecinos de nuestra ciudad, el cuidado del medio ambiente, la infraestructura vial que se deteriora por el alto tránsito de vehículos de gran porte y la economía local”.
“La prohibición es ficticia”
“Es incomprensible”, dijo Gispert sobre la actitud de quienes no acompañaron. “La prohibición de que los colectivos de dos pisos anden por la ciudad es ficticia. Tengo fotos de colectivos estacionados en la vereda de la municipalidad. Por eso no es que estamos planteando un cambio que significará un impacto social. Hoy los colectivos están. Por supuesto algunos, lo que autoriza el municipio. Hoy podríamos haberlo resuelto y convocar a todos los sectores involucrados, empresariales y vecinales, para encontrar una salida a este problema”, dijo. Y recordó: “La otra vez trataron sobre tablas una solución a medias y esta vez vaya a saber porqué no. Para mí es incomprensible”.
Explicó que pedirán que el proyecto se trate en la reunión de comisión, y adelantó que lo presentarán como despacho el jueves próximo.
“Nos dieron la espalda”
Hasta el Concejo llegó una nutrida delegación de empresarios hoteleros y operadores estudiantiles para respaldar el pedido de suspensión. Tras la negativa, se pusieron de espaldas al cuerpo legislativo como gráfica expresión de malestar. “El Concejo nos dio la espalda”, resumió Rodrigo Serna, y enfatizó que la ordenanza “no convence a nadie”.
“No fue discutida, no fue consensuada y en cada reunión que hemos pedido con proyectos para solucionar este tema no hemos sido recibidos. Esto es muy grave. Carlos Paz está perdiendo clientes ahora. Hay empresas que eligen otros destinos, y otras ciudades están aprovechando esta situación como para armarse para el turismo estudiantil el año que viene”, advirtió.
Aclaró que la medida “no afecta sólo el turismo estudiantil, pero hoy lo tenemos encima y no hay muchas soluciones a corto plazo. La suspensión por un periodo lógico de tiempo era lo que esperábamos”.
Señaló que pedirán una reunión con la comisión de Turismo del cuerpo legislativo y otra al secretario de Turismo para que se explaye sobre el tema. “Vamos a seguir trabajando. Se están perdiendo clientes y fuentes de trabajo y esto lo va a sufrir Carlos Paz”, insistió.
“Estamos impactados”
Por su parte, Liliana Picatto, presidenta del centro vecinal Costa Azul Sur, se mostró contraria a la idea de suspender la normativa. “Hay una ordenanza y deberían cumplirla. No puede ser que los vecinos estemos perjudicados. Acá no se habla de turismo ni de los empresarios, si no del tipo de transporte que tiene la ciudad”, aclaró.
Criticó que, la ordenanza vigente “nunca fue clara, no se podía lo que después sí se podía y está llena de excepciones que perjudican a algunos y benefician a otros.
Nosotros como vecinos nos sentimos perjudicados y no estamos considerados”.
Opinó que para salir de esta situación, “hay que organizar y planificar”.
“El turismo debe llegar a la ciudad, los colectivos deben quedarse donde corresponde, y los turistas deben trasladarse con medios acordes a la diagramación de la ciudad”, acotó.
Insistió con que para los vecinos, “esto se trata de una cuestión de salud”.
“En el barrio tenemos enfermos siquiátricos. Esto no tiene paz. No pueden estar sufriendo en estas condiciones. Estamos impactados de punta a punta, desde Tokio hasta Séneca por Rosario. No nos consideran como vecinos”, cerró.
Nota correspondiente a la edición n° 440 del semanario La Jornada, del 30 de octubre de 2016.
