Por Hernán Ibar
Arrancó la temporada para el vóley de Villa Carlos Paz y las ilusiones se renovaron en el Polideportivo de Santa Rita.
El equipo femenino, ahora comandado por Maximiliano Manchinu, dio sus primeros pasos en la categoría A1 en la Federación Cordobesa de Vóley.
Las victorias ante Alianza Jesús María y Unión Eléctrica hacen ilusionar con que las carlospacenses van a tener una grata temporada.
En este caso, haremos referencia a dos de los pilares que tiene el conjunto local y que vienen representando al Polideportivo desde hace tiempo.
Valentina Rovasio y Tatiana Rajczakowski, realizan un repaso de su carrera deportiva, teniendo dos historias de vida que representan al esfuerzo y compromiso.
Sin ningún tipo de reproche, se animan a soñar con volver a jugar en la División de Honor, pero sabiendo que aún deben transitar un camino largo.
Además cuentan que quieren retornar los enfrentamientos con el Club de Pesca, en aquellos clásicos que paralizaban la ciudad.
Valentina, hoy estudiante de Licenciatura Química, recuerda sus comienzos con natación sin saber qué meses más tarde su gran pasión sería el vóley.
En cambio, Tatiana, inició su carrera deportiva en Chaco, representando la camiseta de la Cooperativa, que también le decían Poli, vaya casualidad…
Tiempo más tarde, a los 14 años cuando se vino a vivir a la villa, desembarcó en Santa Rita.
Hoy, amigas dentro y fuera de la cancha, asumen el rol de protagonistas y la responsabilidad de llevar al Polideportivo a lo más alto de Córdoba.
– ¿Qué análisis se hace de este arranque en la A1?
– Valentina: El hecho que hayan vuelto varias jugadoras fue algo muy positivo para el equipo, que nos va a hacer crecer a cada una, tanto individualmente o grupalmente. Además tuvimos el cambio de entrenador, Maxi vino con muchas nuevas ideas, nos hizo trabajar durante el receso así que ahora estamos acomodándonos al juego, y él también adaptándose a nosotras.
– Teniendo en cuenta esto, ¿cuáles son las expectativas para 2017?
– Tatiana: La idea es principalmente mejorar, superarnos con respecto al año pasado, que no fue muy bueno. Gracias a Dios se están empezando a notar los cambios, estamos más desenvueltas como equipo y acostumbrándonos a la vuelta de algunas jugadoras que en su momento fueron importantes en el plantel.
– ¿Con qué campeonato y categoría se encontraron este año?
– Tatiana: Básicamente es lo mismo del año anterior, nuestro objetivo tiene que estar en mantener la cabeza fría y darle para adelante. El campeonato se hace largo, pero como jugadoras tenemos mucho y podemos dar pelea. Lo que nos falta es un equilibrio para mejorar lo que es la frialdad al momento de jugar, de tomar decisiones, cerrar los partidos, con todo lo que eso significa.
– ¿Se pueden ilusionar con el ascenso?
– Valentina: En realidad nunca se habla de ascenso, pero sí mejorar un par de cosas que veníamos fallando temporadas anteriores. El resultado va a depender de ese trabajo, del esfuerzo que haga el equipo y el entrenador. Queremos mantener al Poli en un buen nivel, así que será una consecuencia del juego que propongamos.
– ¿Extrañan jugar el clásico con el Club de Pesca?
– Tatiana: La verdad que se extraña, es algo que nos queda pendiente, sería una gran alegría para todas poder pelearle de igual a igual los partidos, más que nada porque es un equipo bien formado, con jugadoras experimentadas, así que sí, sería muy lindo volver a jugarlo.
– ¿Cómo ven al vóley en Carlos Paz?
– Valentina: Esta en una etapa de receso, hace poco se dio la noticia que en el Club Sarmiento se ha desintegrado el equipo femenino más que nada por problemas económicos, lo cual se vio una gran cantidad de jugadoras nuevas tanto en nuestra categoría como en las Amigas por el Vóley. Si bien es bueno para el Polideportivo que lleguen, es malo a su vez para el deporte en Carlos Paz, parece que por ahí se necesita más ayuda para que se acerque más gente a aprender y divertirse con el vóley.
– ¿Cómo arrancaron a jugar esta disciplina?
– Tatiana: En mi caso fui invitada por una amiga, estaba haciendo folclore. Me invitó a los ocho años y ahí arranqué, me enamoré, lo hago con muchísimas ganas y no pienso dejarlo.
– Valentina: Yo había ido a natación con Marina, que ahora juego con ella. En ese entonces me decía que jugara al vóley, mucha atención no le prestaba, hasta que mi mamá me dijo que arranque y pruebe. En el primer entrenamiento me fui antes porque no me gustaba, mintiéndole a la entrenadora diciéndole que me tenía que ir a estudiar (risas). Pero siempre volvía, nunca dejé y acá estoy.
– ¿Es complicado llegar a ser jugadora profesional?
– Tatiana: Depende de varios factores, las condiciones, y el entrenador es algo decisivo en la etapa de formación, pero con ganas e incentivo vas a tener diferentes oportunidades.
– ¿Por qué elegir el vóley y no otro deporte?
– Valentina: El vóley es un deporte íntegro, te da muchas cosas, no solamente te entrena, sino que también te aporta desde lo mental. Cuando fui creciendo en este deporte me di cuenta que también le hacía bien a mi cuerpo y cabeza por que trabajaba mucho con el equipo, teniendo objetivos para seguir y alcanzarlos. Esa es una de las cosas que rescato del vóley.
– ¿Qué fue lo mejor que les pasó con el vóley?
– Tatiana: Lo mejor que me dio el vóley fue conocer a mucha gente, de distintos lugares. Yo era de Chaco y viajábamos a distintas provincias, y siempre una gran energía en cada torneo que íbamos. Eso fue lo mejor.
– Valentina: Son varias cosas… En su momento ser parte de aquel equipo que ascendió fue algo muy lindo, pero también me quedo con las amistades que formamos con mis compañeras a lo largo de los años.
– Un sueño en esta disciplina…
– Valentina: La idea sería mantener el equipo por mucho tiempo, nosotras vemos a las Amigas por el Vóley y hay muchas que vienen jugando 20 años juntas. Un sueño sería mantener al Poli con el mismo grupo durante varios años.
– Tatiana: Queremos crecer con el equipo que estamos formando, tratar de mantenerlo porque es lo importante a la hora de jugar mejor, y seguir por muchos años más.
– Es importante el apoyo de la familia…
– Valentina: Obviamente que sí, la familia es importante, más que nada los fines de semana se ve que dejan por ahí un domingo para venir a alentarte o están ahí cuando te pasa algo, una lesión, o volver a tu casa y que te esperen con la comida lista, es algo que no lo vemos todo el tiempo pero es vital para nosotras.
– Tatiana: Claro que sí, con mis hermanos todos hacemos vóley, y mis viejos siempre apoyando de atrás. Eso es muy importante para que una venga tranquila y no piense en el resto, son muy fundamentales en todo.
Nota correspondiente a la edición n° 459 del semanario La Jornada, del 02 de abril de 2017.
