“El Uno” (Solís y Avellaneda – Villa Carlos Paz – Octubre de 2017)

Cuenta una leyenda del norte cordoobé, que cuando Prinio Agustín Carreras llegó a este mundo, la partera le dió el chirlo en la cola para que llore y asé llene sus pulmones de aire seco y serrano… y el bebé, coloraadito, automáticamente agarró el pito…y sopló !!!

Sellaba así su destino… destino de zorro gris… aunque medio colorao.

Real o no, eso ocurrió hace 62 años ya… en la localidad de San José de la Dormida.

Pero estoy en Carlos Paz, en 2017, y con otro auténtico personaje que el pasado 21 noviembre cumplió 39 años de servicio en las calles de mi Villa.

Entró a ‘La Muni’ para laburar en tránsito, allá por 1978, con el Comisionado Bosch (flojito de papeles) sentado en el “Sillón de Descotte”.

Y puedo avanzar en el tiempo con las intendencias… a ver si me sale: Galíndez, Grimberg, Felpeto, Felpeto, Conde, Conde, Dellamaggiore, Felpeto, Felpeto, Avilés y… Avilés. Y todavía sigue soplando.

Y justamente con Esteban se bajó de su inseparable moto… y se ganó un sitio en un autito (naranja, obvio).

Pensar que en sus días iniciales le tocó ordenar el tránsito cuando salimos como locos a festejar los triunfos que nos regalaron Menotti, Kempes, Fillol, Passarella, Galván, Valencia, Oviedo, Baley (debo nombrar a los de la T), y tal vez este año le toque hacerlo para los festejos del mundial de Rus… no… no creo tengamos mucho pa’ festejar.

– Prinio, porqué te dicen El Uno ?!?; pregunto con sagacidad, y acento neutro onda CNN.

– Y… porque soy el móvil Uno; responde con practicidad norteña.

Le queda acento del norte pegado como abrojo, como #AmorSeco ,en la toonada… y cuando se lo hago notar… sonríe.

– Está muy loca la gente?!?; intento hacerlo hablar mal de alguien, a lo Mauro Viale (noto que voy cayendo en caída libre)

– No tanto, pero está más apurada. Cuando los veo nerviosos, les hablo y se calman!!!; me vuelve a acomodar con su respuesta.

Asegura (y le creo) que esta es su vocación: el tránsito lo apasiona. No acredita en su legajo problemas con nadie, sea conductor o peatón. Nunca.

Entiende que de aquel pueblito del 78 son las mismas calles… pero hay más autos… más grandes todos, bondis… poco lugar para estacionar y la gente vive más apurada.

– Hay que adaptarse; dice sonriendo.

Como todo buen gaucho (ama con locura a los caballos) que siente que “le sobran” un par de horas por la tarde, el Uno atiende un (leeme bien) Merendero!!! Qué más decir?!?

Prinio, el Uno, el del Móvil Uno… me deja y se aleja…

Silbato, ruido de motores y de ciudad es lo que queda de telón de fondo.

#ElPitoUno

#PersonajesDeLaVilla

#HeroesUrbanos

 

MAIL: [email protected]

FACEBOOK:LUISTORTOLO

TWITTER:LUIS TORTOLO

INSTAGRAM:PHOTORTUL

 

Nota correspondiente a la edición n° 496 del semanario La Jornada, del 08 de enero de 2017.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here