Por Alejandro Gómez
Villa Carlos Paz y Malagueño quedaron hermanadas por la Memoria, la Verdad y la Justicia, durante una histórica sesión conjunta entre los cuerpos legislativos de ambas ciudades que tuvo lugar el jueves pasado por la mañana en el Espacio para la Memoria “La Perla”.
El acto estuvo presidido por el titular del Concejo de Representantes de Carlos Paz, Walter Gispert, y el vice presidente 1° del Concejo Deliberante de Malagueño, Adrián Lucas Navas, y contó con las presencias de los intendentes Esteban Avilés y Pedro Ciarez, el director del Espacio para la Memoria “La Perla”, Emiliano Fessia, y Elena Gallinari Abinet, la primera nieta recuperada nacida en cautiverio.
También formaron parte de la ceremonia representantes de organizaciones de Derechos Humanos, familiares y amigos de desaparecidos, ex presos políticos y sobrevivientes, autoridades municipales, regionales y provinciales y vecinos de las dos ciudades, además de dirigentes políticos de distintos partidos.
Entre ellos se destacaron los legisladores Liliana Montero, Juan Pablo Quinteros, Daniel Juez y Carmen Nebreda, la exconcejala de Córdoba Olga Riutort, Carlos Vicente, Soledad García (exdetenida), Beatriz Castillo y sus hijos Adriana y Carlos Corsaletti (sobrevivientes de La Perla), y miembros de la Comisión y Archivo Provincial de la Memoria.
En el marco de la sesión conmemorativa de los 40 años de la implementación del terrorismo de Estado en nuestro país, ambos concejos aprobaron por unanimidad una resolución donde declararon su “compromiso con la lucha por los derechos humanos y la preservación de los espacios de memoria”.
Durante el tratamiento del tema ediles de ambos cuerpos legislativos tomaron la palabra, destacándose el conmovedor mensaje de la carlospacense Laura Orce, quien tiene familiares directos desaparecidos y asesinados durante la dictadura (ver aparte).
Gustavo Molina, por su parte, abogó por “recuperar como sitio de memoria la exCasa de Hidráulica”, ubicada en inmediaciones del dique San Roque.
Previamente se mostró un video con duros testimonios de vecinos de Malagueño vinculados con ‘La Perla’ cuando funcionó como campo clandestino de detención y exterminio.
Tras levantarse la sesión, Avilés, Ciarez, Gispert y Navas descubrieron una plaqueta recordatoria.
“Esta idea nos hace a los argentinos tomar dimensión que, desde el punto de vista institucional, la mejor forma de tomar la historia realmente con seriedad, con aprendizaje para valorizar como construimos políticas hacia el futuro, es con este tipo de presencia. Estar acá en una sesión pública, que sea entre las dos ciudades también hace otro tipo de relación respecto a las responsabilidades que tenemos en la región, así que es bueno destacar la actitud política y cívica”, reflexionó Avilés.
Por su parte, Ciarez afirmó que, “es necesario incorporar un ADN social para que esta época tan terrible, tan oscura, quede grabada en las generaciones culturales. Y la única forma de hacerlo es incorporándolo, que se apropien de este lugar. Cerrado no sirve para nada. En cambio cuando se le da acceso, especialmente a las generaciones nuevas, es bueno para que lo incorporen y se sepa que esto no debe ocurrir nunca más”.
Luego se plantó un ejemplar de la especie “Plumerillo de Oro” en el denominado ‘Bosque de la Memoria’.
Se trata de un culto en memoria a los que dieron su vida, inspirando a una nueva generación, una semilla de esperanza, para dar luz, donde cuidar y preservar la vida nos involucra a todos.
Beatriz Castillo y sus hijos, sobrevivientes de La Perla, enterraron el árbol junto a integrantes de organizaciones de Derechos Humanos.
“Ojalá hayamos sumado en la lucha por la verdad”, concluyó Gispert, principal impulsor de la iniciativa.
Ahora y siempre!
Apenas terminó la sesión conjunta, fueron invitados a dirigirse a los presentes tanto el director del Espacio para la Memoria “La Perla”, Emiliano Fessia, como Elena Gallinari Abinet.
Y las palabras de la nieta recuperada alejándose del protocolo para recordar a los desaparecidos, fue digno broche final para una jornada que permitió llevar vida y representación democrática, a un lugar signado por la muerte, el horror y la dictadura.
Así, el grito ‘30 mil compañeros desaparecidos, presentes! 30 mil compañeros desaparecidos, presentes! 30 mil compañeros desaparecidos, presentes! Ahora y siempre!’, retumbó en la nave central de La Perla, como claro símbolo de que la lucha por Memoria, Verdad y Justicia, no se negocia.
Nota correspondiente a la edición n° 409 del semanario La Jornada, del 20 de marzo de 2015.
