El viernes 24 de marzo en la Plazoleta de la Memoria se desarrolló un acto para conmemorar un nuevo aniversario del golpe de Estado que instituyó un plan de persecución y exterminio a quienes se oponían a la dictadura.
Participaron organizaciones de derechos humanos, docentes y alumnos, vecinos y familiares de víctimas de la violencia institucional. Entre ellos, estaba presente la madre de Franco Amaya, Laura Cortez, que decidió movilizarse unos días después de que se cumpliera un mes del el asesinato del joven a manos de la policía de Córdoba. “Vine por la memoria”, dijo y advirtió que no está conforme con el procedimiento de la justicia y que ninguna autoridad del municipio, el gobierno provincial, la fiscalía y la policía se puso en contacto con la familia. “Me hubiera gustado que el otro policía (José Ezequiel Villagra) también vaya preso, porque fue cómplice e hizo abandono de persona. En ningún momento trató de ayudarlo, no se merece estar libre se merece ir preso”, argumentó.
Durante el acto se leyó un manifiesto que recuperó la memoria de quienes fueron desaparecidos y asesinados por el Terrorismo de Estado. El documento hizo mención especial al periodista Rodolfo Walsh, ya que este año es el 40º aniversario de su muerte.
Las autoridades de la escuela Presidente Sarmiento compartieron con los presentes las producciones de sus alumnos de 5º y 6º grado realizadas en el marco del Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia. “El mensaje que damos desde el colegio es que no fue una guerra, fue violencia institucional. El estado provocó todo esto, eso es lo que más recuerdan y defender la democracia. En una época en que los docentes estamos luchando por nuestro sueldo y nuestra dignidad laboral es un mensaje muy importante”, explicó Susana Vera, vicedirectora y miembro de la Comisión en Defensa de los Derechos Humanos de Carlos Paz.
También, realizaron intervenciones artísticas los alumnos del IPEM 316. Soledad Lozano acompañó a sus estudiantes y enfatizó la importancia de que participen de estas conmemoraciones: “La razón fundamental es porque si no les enseñamos a los niños y jóvenes lo que pasó puede volver a repetirse, corremos ese riesgo. Lo hacemos siempre desde los hechos, participamos desde la acción y siempre con una intervención artística”. “Un feriado están acá trabajando, esto no se lo olvidan más, esto hace a la memoria”, agregó.
Nota correspondiente a la edición n° 458 del semanario La Jornada, del 26 de marzo de 2017.
