Por Hernán Ibar
El piloto de karting de Villa Carlos Paz sigue creciendo y en las últimas semanas volvió a correr en la Rok Cup de Italia donde se metió entre los 20 principales kartistas del mundo en su divisional.
Esta es una de las mejores temporadas para Matías Fernández en lo que va de su carrera deportiva ya que, entre otras cosas, a principios de calendario cumplió el ansiado debut a bordo de los monoplazas…
Primero se integró a la Fórmula Renault Plus donde tuvo una brillante actuación en su debut junto al equipo Girolami Racing llegando sexto en el autódromo de Paraná.
Como si eso fuera poco, de la mano de Luciano Sarbag, el joven se convirtió en flamante refuerzo del JLS Motorsport para el campeonato de la FR2.0.
El debut nada más ni nada menos fue en el Autódromo Internacional de Termas de Río Hondo.
Pero nunca olvidándose de su gran amor, los karting, y así también el carlospacense hoy da pelea en el campeonato argentino, siendo el actual líder de la ICC Sudam, y aguardando por la fecha coronación en Mar del Plata que tendrá al representante del Zaffaroni Kart con el objetivo puesto en ser “campeón”.
Todo comenzó a los cuatros años… si bien ya por ser Fernández era sinónimo de llevar al automovilismo en la sangre, el “pequeño gigante” recibía su primer karting por parte de sus familiares y la historia daba sus primeros pasos.
Al poco tiempo, llegó su primer carrera, y como olvidarla no?…
Siendo uno de los más chicos, ‘el Mati’ consiguió ganar en el debut de aquella final disputada en Colonia Caroya.
Con el pasar de los años, Matías Fernández se ha ganado un nombre dentro del mundo tuerca y tampoco es para menos… en más de diez años, el de Villa Carlos Paz se llenó de victorias, podios y campeonatos, a nivel provincial, nacional y también haciendo lo propio en el exterior, representando al país de la mejor manera.
Pero esto no hubiese sido posible sin la presencia de su familia, mamá Marcela, su gran maestra, que a pesar de tener que adaptarse a los fierros, acompaña a su hijo dentro y fuera de la pista; su hermana Julieta, la más grande de los Fernández, que aconseja a Matías para brindarle su apoyo en cada carrera a la que transcurre; y su gran ídolo en todo esto, su papá Sergio, que siempre estuvo, está y estará, alentando en todas las competencias a nivel local, provincial, nacional o por el mundo.
Simpático, con humildad, ‘el Mati’ Fernández es respetado por todos, siempre con una sonrisa más allá del resultado, da muestras que hoy aquel pequeño ya se ha convertido en un gigante.
Soñando con llegar a correr en la fórmula europea, o porque no en el Súper TC2000 o Turismo Carretera, a nivel nacional, tiene como gran referente a un amigo, Facundo Chapur, otro cordobés que está en la élite de los mejores pilotos del país.
Siendo un adolescente, Fernández quiere terminar el secundario con la idea de llegar a poder ser un piloto profesional, y vivir del automovilismo, pero además también sueña con estudiar alguna carrera terciaria.
Un gran año se está yendo, pero ojo… la película continúa. Con un futuro que promete y alienta, Fernández no se achica y va por todo…
– ¿Cuáles son la conclusiones de tu participación en la Rok Cup disputada en Italia?
– Las conclusiones fueron muy positivas ya que pudimos estar entre los veinte primeros pero también con un poco de sabor amargo por que anteriormente había estado entre los diez y un mal cálculo nos dejó afuera de una manga y eso nos colocó en la posición número veinte para largar la final complicándonos bastante. Fue una categoría que no tenía límite de edad, fue muy bueno haber peleado mano a mano con pilotos de la elite europea, que ya tienen más experiencia.
– ¿Qué balance hacés del año donde pudiste debutar en la Fórmula Renault Plus y 2.0?
– Este año dimos el gran salto, pasamos a un monoplaza, fue un paso muy bueno y positivo, tratando de seguir agarrando la mano y hay que ver qué presupuesto podemos tener para el año que viene.
– Además en el campeonato argentino de karting tenés chances de salir campeón…
– Sí, totalmente. Fuimos muy firmes durante todo el año, falta la última fecha así que hay que ir muy concentrados, vamos con un gran material y hay que aprovecharlo.
– ¿Cómo nació tu amor por el automovilismo?
– Desde un principio mi familia fue muy fierrera, mi bisabuelo, abuelo, hasta mi papá que corrió en moto, auto y karting. Cuando cumplí mis cuatros años mi bisabuelo me regaló mi primer karting, mis tíos, abuelos y mi papá me regalaron todo lo que era indumentaria, casco y botitas. Así que ahí empezó todo, a los cinco años empecé a correr a nivel provincial y a los siete comencé a hacer lo propio a nivel nacional, luego a los diez ya di el salto internacionalmente.
– ¿Qué recordás de esa primera carrera en los karting?
– Era muy chico y todavía no sabía lo que era un montón de cosas. Me gustaba y mi primera carrera pude ganarla, en Colonia Caroya, y el primer año me consagré campeón de Córdoba así que fue un amor desde chico.
– ¿A quién tenés como referente en el mundo automotor?
– A Facundo Chapur, que está todo el día alegre y con buena onda. Como piloto es uno de los mejores que tiene Argentina, y está en el top cinco sin dudarlo, siendo aún muy joven.
– ¿Qué sueño queda por cumplir en tu carrera deportiva?
– Como todo piloto dentro del karting el sueño es llegar a la Fórmula 1. Hoy en día es muy complicado ya que se requiere un gran valor adquisitivo, así que correr afuera en Fórmula, es uno de mis sueños y obvio tratar de llegar a un Turismo Carretera o Súper TC2000 a nivel nacional.
– ¿Con qué te quedás, el karting o los autos?
– Uno no puede avanzar si se queda en el karting pero creo que tiene que estar presente, lo dicen todos los pilotos. Siempre se quiere avanzar a un auto con techo o monoplaza, pero el karting te ayuda y no hay que abandonarlo.
– ¿Qué lugar ocupa el automovilismo en la vida de Matías Fernández?
– Es algo cotidiano ya, desde chiquito estoy pendiente del entrenamiento físico, psicológico, ya toda mi familia se ha acostumbrado a lo que es este estilo de vida, y con el apoyo de ellos atrás.
– ¿Cuesta mucho llegar a ser piloto profesional?
– Siempre que se quiere se puede. Hoy en día ves a chicos con los que he corrido de chiquito que han dejado el automovilismo porque se perdían facetas de la infancia y adolescencia pero creo que son cosas que uno arriesga para hacer lo que quiere y le gusta como faltar a fiestas de quince, cumpleaños… Yo mis últimos tres cumpleaños no los pude pasar con mi familia pero bueno, son riesgos que hace el deporte.
– ¿Cuánto tiene que ver tu familia en los resultados deportivo que has obtenido?
– La verdad que todo, mi mamá, papá, hermana, mis familiares siempre estuvieron atrás mío, y sin ese apoyo uno no hubiese llegado a ser lo que es hoy.
Nota correspondiente a la edición n° 440 del semanario La Jornada, del 30 de octubre de 2016.
