El sábado a tarde se llevó adelante una reunión convocada por el centro vecinal de barrio Costa Azul Norte para abordar la situación del servicio de agua en el sector, de cara al próximo verano.
Para el encuentro se había cursado invitación tanto a la Municipalidad como a la Cooperativa Integral. Sin embargo solo concurrieron los representantes de la Coopi: el gerente de Planificación, ingeniero Juan Carlos Sola; el jefe de servicio José Ipolito; el coordinador del Área de Comunicación, Jorge Boido; y Miguel Podda.
La duda principal de los residentes pasaba por la situación en la que se encuentra el tanque de calle Matacos. Allí se les explicó a los vecinos que desde el viernes pasado, la cisterna fue puesta en funcionamiento. “Los vecinos sabemos que esta no es la solución definitiva al tema del agua, que es un poco más complejo por la geografía, el clima de la región y la disponibilidad de la fuente. Pero es un paso importante y creo que fue un logro de los vecinos, por eso estamos tan contentos”, expresó Laura Balles, vicepresidenta de la entidad barrial.
Cabe recordar que la construcción de la cisterna de Matacos fue bastante accidentada. En marzo de 2014, la municipalidad adjudicó la obra a la empresa Yael Pérez Mayado – X Diseño. Hacia fines de ese año, la obra comenzó a construirse. En septiembre de 2015 se hizo el primer intento de ponerlo en funcionamiento, y el resultado fue la visibilizarían de los problemas estructurales en la cisterna: filtraciones de distintas dimensiones y problemas en la cañería de conducción que, en primera instancia, no resistieron la presión y hubo que reemplazarlas. Luego, se esperó al fin de semana para llenar de agua la cisterna, y este lunes las paredes mostraban las fallas en la estructura.
El ingeniero Sola, por su parte, valoró la instancia de intercambio con los vecinos. Además precisó que pese a la puesta en funciones, la cisterna todavía “presenta una serie de fugas debido a algunas deficiencias estructurales”.
“Se tiene que hacer una buena impermeabilización interior y faltan obras complementarias, tales como el cercado perimetral, la protección de un tablero eléctrico para una jirafa de abastecimiento de camiones que la municipalidad ha implementado ahí. Reparamos algunas llaves que también tenían pérdida. La empresa contratista de la municipalidad no se había encargado de resolver eso y dada la situación que estamos frente a una nueva temporada, lo resolvimos nosotros”, detalló.
Insistió en que la puesta en funcionamiento de la cisterna no soluciona el problema de abastecimiento y calificó de “urgente” la ampliación del ramal San Martín, el ducto que lleva el agua desde el centro hasta los barrios del norte de nuestra ciudad.
“Podemos tener una cisterna de la capacidad del océano Atlántico, pero si no tenemos con que llevar el agua, no sirve”, graficó Sola y remarcó: “Se requiere de una ampliación de la cañería en toda su extensión”.
Otro de los acuerdos arribados en la reunión es que la planta potabilizadora de Costa Azul (que toma agua del lago San Roque) solo se pondrá en funcionamiento con el acuerdo del Centro Vecinal. Además, se emprenderá un trabajo mancomunado para emprender una campaña de concientización en el barrio sobre la importancia de hacer un uso racional del agua.
“Los vecinos de Costa Azul somos bastante conscientes de que el agua nos falta, porque somos el último eslabón de toda la red y estamos en zona elevada. Sabemos que tenemos que racionalizar el consumo”, dijo Balles.
La vicepresidenta también adelantó que planteará en comisión la necesidad de que la municipalidad los motivos de sus ausencia a la reunión. “Los vecinos merecen explicaciones”, expresó.
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