La Aerosilla rechazó la expropiación de sus terrenos

“No estamos de acuerdo en absoluto. La vamos a discutir a muerte”. Así, sin vueltas, el presidente de Aerosilla SAIC, Eduardo Nicollier, se refirió al proyecto que envió el intendente Esteban Avilés al Concejo de Representantes para expropiar parte del terreno donde se levanta el tradicional complejo turístico de Villa Carlos Paz.

En los fundamentos de la propuesta se habla de la necesidad de “garantizar la preservación del bosque serrano en el entorno del Vía Crucis”. El terreno expropiado, dice Avilés, se utilizará para habilitar una calle pública y generar un nuevo acceso al Cerro de la Cruz.

“Pero no es área protegida”, se preguntó Nicollier. E hizo foco en las contradicciones del proyecto.

La firma, de más de 60 años de trayectoria en Villa Carlos Paz, respondió al proyecto y a la instalación mediática del tema con una dura solicitada, donde plantearon que el único conflicto que tuvieron es porque el municipio nunca quiso habilitar el salón de eventos Amathea, ubicado al pie del cerro, dentro del predio sujeto a expropiación.

Nicollier confirmó que este tema está en la justicia.

El empresario reconoció que si bien “en principio nos sorprendió la expropiación, era en cierta forma esperable por los antecedentes y comentarios”.

Respecto a los “conflictos y negativas” que plantearon algunos funcionarios, Nicollier los negó “total y absolutamente”.

“Los contactos con el municipio siempre se hicieron por iniciativa nuestra. Hasta la propuesta de un convenio para ampliar el camino a la Cruz”, dijo a VillaNos Radio.

En este punto, recordó que desde el municipio nunca les informaron por qué no se habilitaba el salón, motivo por el cual la empresa resolvió accionar judicialmente. Este recurso se inició a mediados de 2014, y todavía “está en trámite”.

Para la construcción del jerarquizado salón de eventos Amathea la empresa comenzó a comprar material en 2008, pero las obras se iniciaron recién en 2010, “cuando tuvimos toda la documentación”. Esto es, planos aprobados (“pasaron por todas las dependencias que el municipio consideró necesarias”), estudio de impacto ambiental del gobierno de la provincia, estudio de impacto sonoro de la Universidad Nacional de Córdoba y estudio de absorción de suelos.

“Nunca hubo una objeción del gobierno ni mientras estábamos construyendo”, indicó Nicollier, y precisó que las obras arrancaron en la gestión de Carlos Felpeto y finalizaron con Avilés como intendente.

Aerosilla pidió la habilitación del salón en 2012, pero el municipio nunca la otorgó, y el tema fue judicializado.

Ahora, con esa cuestión no resuelta, el gobierno pretende expropiar parte del terreno de la Aerosilla incluyendo el salón que, según se dijo, no sería demolido, si no que se utilizaría para fiestas de fin de años de las diferentes escuelas y actos y eventos oficiales.

“Primero tienen que justificar que es de bien público. Ahora el proyecto está en comisión del Concejo. Después, si lo aprueban, costará una millonada de mangos que van a tener que pagar todos los vecinos de Carlos Paz”, afirmó.

En este sentido, evitó hablar de montos concretos, aunque especuló que estaría “por encima de los 40 millones de pesos”.

“Las cifras son muy difíciles. Para entrar al salón hay un camino pavimentado con adoquines que lo realizó la empresa”, detalló.

E insistió con que la decisión de la empresa no es cobrar la plata y entregar el predio. “No estamos de acuerdo en absoluto con la expropiación. La vamos a discutir a muerte”, reforzó.

Planteó, al mismo tiempo, que el camino hasta expropiar es largo. “El terreno ubicado al frente de la Aerosilla está declarado bien público sujeto a expropiación hace nueve años, y nunca lo concretaron. O sea. No nos dejan hacer nada, pero tampoco lo compran”, se quejó.

Este terreno, de 900 metros, la empresa lo ofreció al municipio por canje, a cambio de la habilitación del salón de eventos. Pero el municipio tampoco aceptó.

Por eso, sostuvo que en caso de aprobarse la nueva expropiación (se necesitan dos tercios de los votos en el cuerpo legislativo), el tema será seguramente judicializado “y va a pasar al gobierno siguiente”.

“Los números se van a convertir en muy grandes que tendrán que pagar todos los ciudadanos de Carlos Paz y no sé si se justifica que se destinen a cosas como esta”, remató.

Por último, destacó que el lugar donde se levanta la Aerosilla “es el único lugar de la montaña que está protegido contra incendios”. El sistema incluye una cisterna de 30 mil litros de agua para uso de los bomberos, además de los caños en los respectivos conectores para las mangueras distribuidos en toda la ladera.

Nota correspondiente a la edición n° 505 del semanario La Jornada, del 12 de marzo de 2018.