#InformeBomberos – La realidad del cuartel de Tanti

El cuartel de bomberos de Tanti obtuvo la personería jurídica en 1986, pero realizó su primera salida operativa en febrero de 1989. Es el segundo con mayor antigüedad de la zona. El jefe del cuerpo activo es Marcelo Taboada y el segundo jefe Marcelo Rupil, con el grado de Sub Comisario. Hace 28 años que es bombero y comenzó su carrera en el cuartel de Villa Carlos Paz.

La institución está integrada por 30 bomberos. “El trabajo que hacemos es preventivo en la mayoría de los casos, ya sean alarmas de incendios forestales o de baldío”, aseguró Rupil. La prevención ha posibilitado una reducción considerable de las alarmas. En 2016 tuvieron 398 salidas: 188 de incendios de baldío, 40 de incendios forestales y el resto accidentes. “El trabajo preventivo consiste en visitar los lugares de riesgo en la zona de interfase que es entre el campo y la ciudad”, explicó.

El cuartel da solución al 80% de las alarmas, sin embargo, para cubrir las zonas de riesgo el trabajo articulado de los cuarteles de la zona es esencial, “porque sabemos lo que genera un incendio cuando se nos sube a las sierras”, señaló Rupil.

El cuartel cuenta con siete unidades. Dos camiones cisterna que suman una capacidad de 18 mil litros de agua y 1000 de espuma (funciona con detergentes específicos según el tipo y clase de material que se quema), un camión de rescate equipado con herramientas de corte y grúa. También, tienen unidades de intervención rápida: dos camionetas con kits forestales y una capacidad de 500 litros cada una equipadas con devanaderas y mochilas para cada bombero (entran cinco), un utilitario y una camioneta 4×4 para rescates y atenciones sanitarias.

“Estamos esperando que se incorpore un camión de rescate que viene de Estados Unidos con capacidad para 400 litros. Hace tres semanas llegó al país y en un mes estaría en el cuartel”, agregó.

Cuenta con diez equipos autónomos que duran entre 30 minutos y una hora depende de la marca y permiten trabajar individualmente en un ambiente que no es respirable.

El problema que afecta particularmente al cuartel es la falta de agua. “A veces pasamos semanas con el agua cortada así que tenemos que ir a abastecernos al río”, advirtió el segundo jefe. Otro aspecto que preocupa es la deserción de los aspirantes a bomberos por cuestiones laborales, “de entre cinco y quince aspirantes a veces queda uno sólo, la deserción es muy grande”.

La mayoría de pases a reserva de los bomberos activos se debe también a problemas de trabajo. “Esto en algún momento va a tener que dejar de ser gratis. El bombero voluntario no va a dejar de existir nunca, pero estaría bueno que sea reconocido”, enfatizó el segundo jefe en relación a las dificultades que genera compatibilizar el trabajo con la actividad bomberil en muchos casos.

El cuartel se financia gracias al subsidio nacional y provincial. También, tiene un ingreso del servicio de recarga y venta de matafuegos y recibe un aporte del municipio que cubre parte de los gastos de combustible.

El emprendimiento de los matafuegos permite tener un ingreso líquido para poder pagar seguro del personal, comida de la guardia, gastos de combustible y gastos de reparaciones. La forma de organización del cuartel ha incorporado lo administrativo al trabajo diario de los bomberos. “Todo tiene que estar ordenado. El balance lo arman los chicos, lo manejamos entre todos y todos sabemos qué plata tiene el cuartel, hay cuarteles que no lo saben. Es una responsabilidad conjunta por lo menos en este cuartel”, detalló.

El cuartel proyecta ampliar sus instalaciones en un futuro porque tienen vehículos que están a la intemperie por falta de lugar.

 

Cantidad de bomberos: 30 (6 mujeres)

Cantidad de alarmas anuales: en 2016 fueron 398

Móviles: Tiene siete unidades, cuatro livianas: un utilitario con capacidad para llevar 6 personas que se utiliza como transporte para hacer cursos y para atención sanitaria (modelo ’89) y tres camionetas pick up doble cabina 4×4 (una modelo ’94 equipada con un kit forestal y bomba de alta presión, otra Toyota Hilux modelo 2015 para incendios forestales ambas con capacidad de 500 litros y una Toyota modelo 2014 para rescates y atenciones sanitarias). Tres unidades pesadas: dos camiones cisterna uno con capacidad para 10 mil litros de agua y 1000 litros de espuma (modelo ’92) y el otro de con 8000 litros de agua (marca Mercedes Benz y modelo ’88) y un camión de rescate equipado con grúa para rescate vehicular y herramientas hidráulicas de corte.

Equipamiento: cuenta con 26 equipos estructurales (pantalón, chaqueta, cascos, guantes y botas) y forestales para todos los bomberos. Tienen 10 equipos autónomos, que permite trabajar en atmósferas contaminadas. 

Cantidad de socios: 72 socios (en una población estable de 12.000 habitantes).

Costo operativo mensual del cuartel: No fue precisado.

 

Nota correspondiente a la edición n° 475 del semanario La Jornada, del 23 de julio de 2017.

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