1940: Imagen tomada desde los balcones terraza del hotel Carena, hoy sede municipal. En un primer plano la pileta y una construcción destinada al consultorio del joven doctor Osvaldo Carena, quien ocupó la dirección médica de la Fundación Eva Perón y fue médico personal del General Perón en su regreso al país.
Dónde hoy ubicamos la Terminal de Ómnibus aparecen campos de laboreo y una solitaria construcción de la actual esquina de Belgrano y Alvear.
1945: Un mástil con generoso pedestal de piedra ubicado detrás de la demolida capilla de 1915 servía para todos los actos patrios y escolares del pueblo.
Una placa de bronce en grandes letras rezaba ‘Dios y Patria’.
El predio fue donado por la familia del fundador para destinarlo como plaza. Por un convenio en 1964 se instaló allí la primera Terminal de Ómnibus desapareciendo mástil, piedras y placa de bronce.
1950: Aguas arriba del “puente viejo”, hoy llamado Puente Carena, en homenaje al empresario y político del pueblo.
Precisamente las propiedades fueron construidas bajo sus órdenes con el aporte de Francisco Scrosati y su equipo de trabajadores.
Las piedras emergen de las aguas, hoy amplios arenales las cubrieron en casi su totalidad.
Nota correspondiente a la edición n° 559 del periódico La Jornada, del 25 de noviembre de 2020.
