El ambientalista Juan Carlos Paesani, referente de la ONG Educación, Ambiente y Trabajo (EAyT ), defendió este jueves desde la Banca del Ciudadano el proyecto que presentó para proteger el humedal El Pantanillo de Villa Carlos Paz.
Desde ese espacio, fustigó el accionar tanto del Concejo de Representantes (dominado por el oficialismo) como del departamento ejecutivo que conduce el intendente Esteban Avilés. “Actúan como organizaciones cerradas”, criticó e hizo hincapié en la falta de información y de espacios genuinos de participación.
Paesani se presentó con el apoyo del colectivo Todos por el San Roque, centro vecinal Sol y Río y distintos ciudadanos. Muchos se hicieron presentes en la sala de sesiones para acompañarlo.
El destacado activista ambiental explicó que el proyecto para proteger el humedal El Pantanillo (“es elaboración propia”), debe ser tomado como un punto de partida “para que pueda ser enriquecido con diferentes aportes”.
“Debe trabajarse en forma conjunta”, subrayó.
La iniciativa plantea que el municipio declare Área Protegida la zona donde se encuentra el humedal El Pantanillo “en un todo de acuerdo con lo que es el lema de la Convención RAMSAR para este año: el rol de los humedales en el Cambio Climático Global”.
Además, en su articulado solicita que Villa Carlos Paz reclame a la provincia la Reglamentación de la Ley N° 8941 Reserva Hídrica Los Gigantes, a tenor del nuevo ejido que incluye parte de ella y la cuenca del Arroyo Él Sauce que alimenta a El Pantanillo.
Cabe recordar que el humedal El Pantanillo está situado en la zona de calle Roma e Intendente Grimberg de barrio Colinas, pertenece al sistema del arroyo Los Chorrillos (afluente del embalse San Roque) y presta “servicios ambientales invalorables ya que ‘depura’ los caudales contaminados que llegan a ese lugar desde el arroyo Los Sauces y otros”.
Paesani vinculó directamente el abandono del humedal por parte del Estado con la situación actual del lago San Roque. “Estamos en la cuenta regresiva respecto a la vida del embalse. Es un embalse decadente y le queda muy pocos años de vida. Lo único que se puede hacer es prolongar un poco más la agonía.
Los ciudadanos y los que nos gobiernas deben ponerse las pilas en las acciones concretas lo más rápidamente posible para evitar que la contaminación continué destruyendo la fuente de agua y el atractivo turístico”, reclamó.
En este punto, comparó la predisposición para abordar temas de esta naturaleza de la Convención Ramsar y el municipio.
“Al instante que he solicitado algo a la Convención Ramsar lo he tenido. Y no sucedió lo mismo en el municipio de Villa Carlos Paz”, dijo. Y reflexionó: “Nadie es profeta en su tierra. Estamos viendo que se nos muere el lago y no somos capaces de tomar medidas rápidas y urgentes que no cuestan demasiado dinero, como es proteger El Pantanillo”.
“Lamento lo que ha venido ocurriendo en estos años. En Carlos Paz el Concejo y el departamento ejecutivo actúan como organizaciones cerradas y es lo peor que les puede ocurrir”, afirmó.
Respecto al proyecto admitió que, “no tengo muchas expectativas” de que sea tratado.
“No la he pasado bien durante los últimos años y he recibido censura de distintos tipos”, acotó.
También hizo referencia al intento del municipio de impedir que integrantes del Colectivo Cuenca San Roque concienticen a los vecinos sobre la situación del lago y su impacto en la salud.
“Los compañeros no merecen el trato que han recibido el otro día. Todo lo que estamos haciendo es en pos de mejorar la situación de nuestro querido lago”, señaló.
Foto: Luis Tórtolo
Parque Educativo Natural Protegido
Terminada la intervención de Paesani, el concejal Gustavo Molina pidió la palabra para adelantar algunos aspectos del proyecto que presentó para crear el Parque Educativo Natural Protegido El Pantanillo.
La iniciativa recupera el trabajo del ambientalista y le suma lo realizado por alumnos y docentes del Ipem 316 Eva Duarte de Perón de barrio Colinas.
En este marco, la docente Patricia ocupó una banca durante unos minutos para hablar del proyecto y reconoció que, junto a los estudiantes, “pudimos observar el deteriore continuo de El Pantanillo”.
La propuesta se elaboró en el marco de un proyecto educativo interdisciplinario de distintos niveles educativos que involucró al Ipem 316 y la escuela primaria Intendente Grimberg, e instituciones como el CIRSA, la Universidad Nacional de Córdoba y la Cooperativa Integral.
“Ante la sanción del nuevo ejido municipal se debe comenzar a analizar la posibilidad de incorporar nuevas áreas protegidas promoviendo la preservación de nuevos ecosistemas, con una mirada de desarrollo a futuro, en virtud de aportar espacios calidad ambiental ante la posibilidad inminente de nuevas urbanizaciones en la ciudad, y alerta a nuevas problemáticas ambientales que esto puede generar”, destacó Molina.
Durante la sesión, el proyecto fue enviado a la comisión de Desarrollo Urbano Ambiental.
