El pasado 27 de junio, el juez Enrique Buteler, a cargo de la Cámara 6ª del Crimen de Córdoba, dictó sentencia en el marco del juicio contra Gonzalo Benjamín Cabrera (28), Lucas López (36), Alejandro Pavese (59) y Daniel Pedano (53), acusados de haber cometido varios hechos de abuso sexual (ver aparte) contra un joven empleado cuando se desempeñaba en el Corralón de Mantenimiento de la municipalidad de Villa Carlos Paz.
El juez halló culpables a los acusados del delito de ‘abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por el grave daño a la salud mental de la víctima’. La condena para López es de 6 años, Pedano y Cabrera 5 años y medio, y Pavese 5 años y 4 meses.
Por otro lado, también falló a favor, parcialmente, en la demanda civil entablada por la víctima contra el gobierno municipal.
En este caso, condenó al gobierno local a pagar una indemnización de unos 14 millones de pesos en concepto de ‘daño moral y gastos médicos pasados y futuros’.
Sin embargo, y a la espera de que se difundan los fundamentos de la sentencia, desde el gobierno de Villa Carlos Paz anticiparon que apelarán la medida en su contra.
Así lo confirmó el abogado del denunciante, Adolfo Allende Posse.
‘Por parte de la Asesoría Letrada de la municipalidad adelantaron que iban impugnar esta sentencia, evidentemente disgustados con el resultado. Después veremos si esto es efectivamente es así o si la municipalidad se allana a cumplir con la condena que se le impuso’, señaló a La Jornada.
Para el letrado, como lo dijo antes de la sentencia, ‘no puede ser que alguien concurra a su lugar de trabajo, a prestar tareas en un horario determinado, cumpliendo órdenes a cambio de una remuneración, y resulte con las lesiones físicas y psíquicas que ha resultado este chico. Es inaudito y no puede pasar’.
En este sentido y a partir de su experiencia reconoció que, ‘nunca he escuchado un hecho de esta naturaleza, con la gravedad que tiene. No estoy dando detalles verdaderamente escabrosos sobre lo que pasó, pero jamás he visto una cosa así. No me lo logro explicar’.
Por otro lado, se mostró conforme a nivel general con el resultado del juicio ‘en cuanto a las penas que se impusieron a los autores de los hechos y en cuanto a la demanda civil’.
‘Son penas ajustadas a la solución del caso’, señaló, aunque aclaró que podrían haber sido más elevadas.
‘Mi cliente y su familia están conformes. Y la demanda civil prosperó en la mayoría de los rubros que se reclamaban’, agregó.
Si bien las penas son de cumplimiento efectivo en prisión, los acusados seguirán en libertad hasta que el fallo quede firme.
Es que luego de que se difundan los fundamentos de la sentencia, se abrirá la instancia de apelación que podría llegar hasta la Cámara de Casación.
‘Estamos esperando los fundamentos de la sentencia. Hasta ahora se leyó solo la parte resolutiva, y nos tienen que notificar los argumentos en los que se basó el juez para establecer las condenas’, explicó Allende Posse.
Los hechos
Los hechos investigados sucedieron entre diciembre de 2015 y febrero de 2016 en el taller mecánico de la municipalidad, sito en la esquina de Alfonsina Storni y Los Ceibos, de barrio La Quinta.
En aquel momento gobernaba la ciudad Esteban Avilés (flamante intendente electo), quien transitaba su segundo mandato.
El primer hecho sucedió en los primeros días de diciembre de 2015.
Según la causa, mientras tomaban mate, Lucas López habría manoseado a la víctima.
Fueron ‘actos físicos de tocamientos con contenido y significación sexual que vulneraron la libertad sexual del damnificado a razón de que no fueron consentidos libremente, aprovechándose el autor de la vulnerabilidad de la víctima en razón que el mismo se encontraba en una situación de inferioridad’, redactó el fiscal.
El segundo hecho sucedió el 20 de enero de 2016, en el mismo lugar, durante un descanso en las tareas. El expediente dice que los cuatro acusados, ‘Gonzalo Cabrera, Daniel Pedano, Lucas López y Alejandro Pavese, previo acuerdo de voluntades, se dispusieron a cometer un hecho contra la integridad sexual’ del joven compañero de trabajo que hacía muy poco tiempo había comenzado su experiencia laboral.
El tercer hecho, más grave aún que el anterior, describe un comportamiento de ‘abuso sexual con acceso carnal’, según el instructor, el fiscal Ricardo Mazzuchi.
En la misma sede laboral, el 10 de febrero al mediodía, la joven víctima estaba descansando junto con sus compañeros Cabrera, Pedano y López. También con previo acuerdo de los agresores, según la causa, abusaron de él. Cuando la víctima logró zafar, salió corriendo y huyó en su automóvil.
‘Lo sometieron a tocamientos, humillaciones y una serie de conductas de connotación sexual que preferiría no dar más detalles para preservar mi cliente’, había explicado a VillaNos Radio Adolfo Allende Posse, abogado del denunciante, antes de conocerse la sentencia.
Tras el hecho del 10 de febrero, ‘mi cliente ya no volvió nunca más al taller’.
En el municipio ‘lo pasaron a otra área, al Polideportivo, donde estuvo un mes más y después no le renovaron el contrato’.
Nota correspondiente a la edición n° 591 del periódico La Jornada, del 26 de julio de 2023.
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