Al ataque, la impronta de siempre

Durante un acto que se llevó a cabo en el Estadio Arena el pasado lunes 14 de agosto, asumió su tercer período como intendente de Villa Carlos Paz, Esteban Avilés.

Y aunque mucho se habló en el entorno del oficialismo de una ‘nueva impronta’, lo cierto es que, tal como decíamos en estas páginas cuando Carlos Paz Unido se impuso con comodidad en los comicios de junio, enhebrando cuatro gestiones consecutivas, es más de lo mismo.

O en todo caso, potenciado.

Esto quedó perfectamente claro en su discurso de apertura, donde repitió a pie juntillas la receta que CPU viene aplicando desde 2011: ausencia de autocrítica, auto elogios (muchos), cuestionamientos a la oposición (muchos), plantear la discusión entre ‘buenos’ (los que se alinean con el proyecto político del oficialismo) y ‘malos’ (todo aquel que piensa diferente) y, fundamental, identificar un enemigo. En este caso parece ser el sector inmobiliario al que le sumó un estigmatizante ataque a los trabajadores de la construcción.

A nivel de anuncios lo más importante, y relacionado con lo anterior, fue el anticipo de la decisión de suspender por un año la aprobación de nuevos edificios en Villa Carlos Paz (ver páginas 6 y 7) lo que en el momento despertó aplausos entre sus seguidores y que, tras la sanción de la ordenanza respectiva por parte del Concejo de Representantes, abrió una polémica que recién comienza.

En cambio, no hubo ninguna mención a la ‘sorpresiva’ crisis económica por la que atraviesa el municipio. Y decimos que es sorpresiva porque hasta las elecciones municipales del 25 de junio, se había ocultado detrás de una máscara de ‘eficiencia y previsión’ en el manejo de los fondos públicos que no era tal.

Y esta situación llevó al saliente mandatario, Daniel Gómez Gesteira, a impulsar -obviamente a pedido de Avilés- la sanción de una escandalosa ordenanza que establece la libre disponibilidad de lo recaudado por las diferentes cuentas de afectación específica en lo que queda de este año y todo 2024. A propósito, la oposición no descarta ir a la justicia para cuestionar la legalidad de dicha normativa (ver página 4).

El acto

Tras la presentación y agradecimiento a los presentes e invitados especiales, el acto de asunción se inició entonando las estrofas del Himno Nacional Argentino.

Acto seguido se levantó el cuarto intermedio y se retomó la sesión preparatoria del Concejo de Representantes, con la edila de mayor edad (Marcela Bosch), que oficio como presidenta, y la más joven del nuevo cuerpo (Pía Felpeto) como secretaria.

Ambas tomaron juramento a los concejales electos. En primer lugar, ellas, y luego Alejandra Roldán, Sebastián Guruceta, Raquel Merlino, Claudio Bocchetti, Laura Gallardo y Leonardo Villalobo (CPU); Daniel Ribetti, Noe García Roñoni y Fernando Revello (JxCP); y Carlos Quaranta (CPI).

Luego se procedió a la elección de las autoridades legislativas. Fueron designados presidenta Roldán; vice 1º Merlino; 2º Felpeto y 3º Quaranta. Todos por unanimidad.

Ya con Roldán como presidenta, se nombró a Sandra Bohn como secretaria legislativa y a Roberto Giménez como pro secretario, a propuesta del oficialismo y por unanimidad. Y se dio por finalizada de la sesión preparatoria.

De inmediato se inició la sesión de apertura del período ordinario que incluía la asunción del intendente Esteban Avilés.

En este marco se le dio al intendente saliente, Daniel Gómez Gesteira, la posibilidad de ofrecer un discurso de despedida donde aseguró que ocupar el cargo fue ‘el máximo honor’.

A tono con el relato que CPU impone desde hace años, describió un gobierno maravilloso que poco y nada tiene que ver con la realidad que vivimos los carlospacenses -pandemia incluida- en los últimos cuatro años.

Entre los que consideró sus principales logros de gobierno, nombró la lucha contra los ‘exacerbados desarrollistas’, la ‘recuperación’ del servicio de agua, la creación de una sociedad para mantener el servicio de gas natural ‘a pesar de los embates del Enargas’, y la puesta en marcha de un servicio de transporte ‘acorde a las necesidades de los vecinos’.

Sobre las cloacas destacó las obras y gestiones realizadas para avanzar con el saneamiento del lago San Roque.

‘En esta etapa fui feliz y honesto y me sentí incondicionalmente acompañado’, dijo sobre tras agradecer a su familia.

Acto seguido, juró Avilés y se firmó el acta de traspaso de mando, junto a Gómez Gesteira y los familiares del intendente saliente y entrante, entre ellos su mamá, Amelia Rigazzio, su pareja, Marina Mossé y sus hijos.

La palabra de Avilés

El primer discurso de Avilés en su nuevo período como intendente de Villa Carlos Paz comenzó con palabras de agradecimiento a ‘mi querido amigo, Daniel’ Gómez Gesteira.

‘Ha hecho una intendencia respetuosa, ordenada, planificada, previsible y constructiva’ en un contexto ‘pandémico y de crisis económica’.

Sin ponerse colorado afirmó que en CPU ‘nos caracterizamos por trabajar en unidad y en respeto y tolerancia participativa’, y destacó las decisiones tomadas en materia de transporte público, la ‘recuperación del agua’ y la iluminación de la ciudad con luces Led.

Reiteró, al hablar de las cloacas, que ‘hace cuatro años logramos las obras que le van a dar la solución definitiva’ al saneamiento de la cuenca del San Roque y planteó, como aspecto negativo, dos situaciones graves ‘que subsisten: una es la capitalización, que significa el empobrecimiento sistemático de la familia de Carlos Paz, que impacta en la canasta familiar. Eso es la capitalización, aparte de ilegal e irregular. Como también el mayor daño en la historia desde el punto de vista ambiental, que ha sido ese volcamiento irregular y sistemático que lleva adelante la Cooperativa Integral’.

‘Pero estos señores no se manejan solos. No vamos a decir que son el cuco. El cuco está en el poder político. El cuco son los dirigentes que representan a todas las minorías legislativas que tenemos presentes, y que han sido cómplices, que le han dado impunidad política, jurídica y económica a estos atorrantes’, bramó.

Estas declaraciones motivaron el repudio y unánime rechazo de todas las fuerzas políticas aludidas (ver página 3).

En la continuidad de su discurso, Avilés parece haber encontrado en el sector inmobiliario al enemigo que necesita para seguir alimentando su proyecto político, como en su momento fue José Manuel De la Sota, Carlos Felpeto y (siempre) la COOPI.

‘Siempre los carlospacenses hemos tenido los brazos abiertos para todos los que quieran venir a invertir a nuestra ciudad, y estamos eternamente agradecidos, pero también estaría eternamente agradecido si estos inmobiliarios que no son del pueblo contraten a nuestra gente, compren en Carlos Paz, y den certificados de buena conducta de la gente que traen de otros lugares’, lanzó sorpresivamente.

Acto seguido anunció que enviaría al Concejo de Representes un proyecto con pedido de tratamiento urgente, para suspender por 12 meses ‘la aprobación de edificios de viviendas colectivas, en bloque o dispersas, edificios de oficinas y edificios de usos mixtos previstos en el actual Código de Edificación, con excepción de los edificios destinados a alojamientos turísticos o a servicios institucionales, educativos y de salud’.

Efectivamente, el proyecto fue elevado el martes 15 y se aprobó el miércoles 16 en sesión extraordinaria.

En materia de turismo sostuvo que, ‘tenemos un gran desafío y lo podemos lograr: hacer de Carlos Paz un destino internacional’.

‘Seguramente con el trabajo mancomunado con el sector privado, será un objetivo fácilmente alcanzable’, prometió.

En el final, expresó que, ‘con nuestra identidad seguiremos construyendo un futuro mejor para nuestras familias, con nuestra identidad disfrutemos de vivir en esta hermosa ciudad, pero sobre todo con nuestra identidad vamos a garantizar vivir en libertad’.

Como se dijo, más de lo mismo. Y recién comienza.

Como dato anecdótico vale decir que cuando Avilés finalizó el discurso y todos corrían para saludarlo, se les tomó juramento a los nuevos integrantes del tribunal de Cuentas: Daniel Gómez Gesteira y Patricia Morla (CPU), y Gustavo Molina (JxCP).

Nota correspondiente a la edición n° 592 del periódico La Jornada, del 30 de agosto de 2023.

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