El Comité Ejecutivo de COOPERAR (Confederación Cooperativa de la República Argentina) se reunió esta tarde con las autoridades de la Cooperativa Integral para analizar el conflicto del servicio de agua a partir del decreto del intendente Avilés mediante el cual pretende quitarle la concesión del servicio de agua, tras 53 años de labor cooperativa.
Del encuentro participaron el presidente de Cooperar y vicepresidente del ACI, Ariel Guarco; el director de Cooperar en el INAES José Orbaiceta; y el presidente de FAES Ricardo López, todos integrantes del Comité ejecutivo de COOPERAR.
De parte de la Coopi estuvieron la presidenta Alicia Clérico; la secretaria Edith Manera; el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Coopi, José Ipolito; el abogado representante del SIPOS Gustavo Valdés; el representante de la Coopi en COOPERAR, Mario Díaz; trabajadores y consejeros.
COOPERAR es una entidad representativa de la economía solidaria argentina, referencia para la Alianza Cooperativa Internacional (ACI) por su desarrollo a nivel regional y que desde hace 50 años viene integrando a organizaciones de servicios públicos, consumo, educación, salud, turismo, ahorro y crédito, producción y vivienda, entre otros rubros que hacen a la vida cotidiana de más de 10 millones de argentinos. Es una de las confederaciones que regula y contiene al movimiento cooperativo nacional y que aglutina a 69 federaciones de cooperativas.
Guarco sostuvo que desde entidad están “preocupados y ocupados” de la situación en la que se encuentra la Coopi, sobre todo buscando abrir instancias de dialogo que puedan permitir que las partes se sienten a conversar.
“Este tipo de conflicto tiene un solo sujeto que se perjudica y es el ciudadano común a quienes las dos partes deben representar y por quienes las dos partes trabajan. Nuestra mayor ayuda viene de darle mayor visibilidad al tema a nivel nacional y de intentar generar los mecanismos de contacto y vinculaciones que permita que los actores involucrados se sienten a dialogar”, dijo.
Sostuvo que resulta fundamental que la población tenga en claro que el modelo de gestión cooperativa representa “un colchón de contención social para una comunidad”.
Al ser consultado sobre si en otras partes del país se dan conflictos similares, respondió: “No de la magnitud de este”. En este sentido remarcó que “cuando una cooperativa sufre algún problema, se ve amenazado todo el sector”.
“No podemos permitir que se afecte a una cooperativa. No porque tengamos miedo al efecto dominó y que la experiencia se pueda replicar, sino porque nos están tocando las entrañas. Nosotros estamos hablando todo el tiempo de integración y alianzas estratégicas entre el sector privado, el sector de la economía social y solidaria que nosotros representamos, y el estado. Este tipo de situaciones van en dirección contraria.
“Creemos que el sector expresará el potencial que tienen si trabaja estratégicamente con un Estado que entiende que somos herramientas que ponemos a disposición de políticas públicas que tienen que propender a una mejor calidad de vida de los habitantes”.
Nota correspondiente a la edición n° 435 del semanario La Jornada, del 25 de setiembre de 2016.
