#Agua El Frente Cívico rechazó el decreto: “Avilés ha tirado por la borda todos los esfuerzos para lograr un acuerdo”, dijo Gispert

Molina - Gispert - SequeiraEl concejal Walter Gispert (CPU-Frente Cívico) criticó la decisión del intendente Esteban Avilés de quitarle el agua por decreto a la Cooperativa Integral. “Ha tirado por la borda todos los esfuerzos que se estaban haciendo en el cuerpo legislativo para encontrar un punto de acuerdo en la sociedad, y resolvió con su sola firma esta decisión”, dijo, y aludió al “acuerdo de secretarios” que acompaña el decreto. “Ese acuerdo no es voluntario, el que no adhiere se tiene que ir”, aclaró.

Sobre el decreto sostuvo que, “es muy básico” y representa “un paso más en las contradicciones que ha tenido en este tiempo”.

Recordó que tras el anuncio del 1 de agosto, Avilés envió al Concejo un proyecto de ordenanza para municipalizar el servicio de agua. Cuando vio que no reunía los votos necesarios, mandó otro proyecto, en este caso, convocando a un referéndum. Tampoco logró el respaldo suficiente y ahora va por el decreto.

“El jueves pasado votamos por unanimidad que el proyecto fuera al Consejo de Partidos Políticos. Ese mismo día se convocó y la decisión llevaba tranquilidad, pero de buenas a primeras nos encontramos con esto que hay que ver legalmente y políticamente cómo sigue”, aseguró.

En este contexto, Gispert sostuvo que, “hay que estar muy tranquilo y hablar mucho para ver como encontramos nuevamente la posibilidad de encauzar esto en un marco de mayor razonabilidad”.

Opinó que, “seguramente la Coopi tomará medidas judiciales”, e insistió con la preocupación por el futuro de los trabajadores.

“Desde el principio venimos planteando que cualquier decisión tiene que tener en cuenta garantizar el servicio y garantizar que 250 trabajadores sigan en las mismas condiciones. Avilés dijo que le van a respetar el salario pero la pregunta es cómo. Hay muchas preguntas y el decreto no da respuestas”, enfatizó.

Sobre el decreto expresó que, “únicamente lo puede revocar la justicia”, aunque el Concejo “sí se podrá expresar sobre el decreto”.

“La pregunta es la atribución del intendente. Es cierto que es una concesión caída pero también es cierto que hace ocho años se mantiene el sistema”, dijo, y consideró que, “lo más importantes es que hace un mes mandaban una ordenanza y decían que necesitan dos tercios y hoy lo quiere resolver con un decreto”.

“El Concejo, aún con discrepancias, hizo un gran esfuerzo para encontrar una salida a la crisis pero el intendente resolvió saltearlo y estará en cada uno de los ediles tomar nota de esta actitud del departamento ejecutivo”, finalizó.

Su compañero de banca, Gustavo Molina tuvo similares apreciaciones. En este sentido consideró “una chicana” la afirmación del intendente respecto de que la ruptura de la paz social “es un verso”. Y dijo que un dato representativo del escenario de conflicto es la movilización de las fuerzas policiales en los edificios públicos (tanto en la Municipalidad como en el Concejo de Representantes).

“Evidentemente estamos ante un escenario de ruptura de la paz social. Si fue una chicana, corre por cuenta de quien la dice. No me preocupa eso, me preocupa la situación en la que estamos. Hay compañeros de la Cooperativa que están angustiados, que tienen bronca o que están anonadados. Esto es una olla a presión”, dijo.

Sostuvo que el decreto de Avilés lo hace recordar a la política del garrote que empleaba Theodore Roosevelt a principio del siglo XX basada en la utilización de la fuerza como mecanismo de dominación de otros países.

En esa línea, citó una frase que utilizaba el presidente norteamericano, tomada de un proverbio del África occidental que decía “habla suavemente y lleva un gran garrote, así llegarás lejos”.

“Distraer a los concejales, a los sectores políticos, la iglesia, distintas ONG’s pidiendo diálogo, pero siempre estuvo el garrote ahí. El garrote era el decreto. Y ayer (por el jueves) lo mostraron. Hicieron caso omiso al pedido de diálogo, que tiene que ver con el buen gobierno y la democracia”, consideró.

Al momento de la firma del decreto, Avilés no convocó a ningún concejal. Ni siquiera a quienes en todo momento han justificado y avalado su accionar unilateral e inconsulto. “En la foto no aparecen los concejales porque fueron despreciados”, expresó.

Y remarcó: “Parece que lo único que vale es lo que dice el intendente. Nosotros ya nos expresamos sobre lo peligroso del pensamiento hegemónico y la palabra única”.

 

Nota correspondiente a la edición n° 432 del semanario La Jornada, del 04 de setiembre de 2016.

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