Los Bomberos y una realidad cada vez más complicada: la comisión directiva sigue jugando con fuego

Por Evelina Ramírez

La situación en la que se encuentra el Cuartel de Bomberos de Villa Carlos Paz es cada vez más complicada. La relación entre el Cuerpo Activo (integrado por los bomberos que brindan ayuda en situaciones de emergencia) y la Comisión Directiva (que realizan tareas administrativas y son los responsables en el manejo de fondos que percibe la institución), se tensa cada vez más.

Vale recordar que el 29 de diciembre del año pasado, el Cuerpo Activo de bomberos decidió denunciar penalmente a la Comisión Directiva por el “delito de defraudación por administración fraudulenta”. La causa está en manos de la Fiscalía N°2, a cargo de Ricardo Mazzuchi.

La acusación del Cuerpo Activo, es simple: al parecer, los fondos que percibe el cuartel de Bomberos en concepto de subsidios (municipales, provinciales y nacionales), bonos contribución, negocio de matafuegos e inspecciones, fueron utilizados por la Comisión Directiva para otra finalidad que nada tiene que ver con la tarea diaria del cuerpo activo. El abogado que representa a los bomberos, Carlos Nayi, indicó que la supuesta defraudación ascendería a los dos millones de pesos correspondiente a los últimos años pero que el ilícito se remontaría a mucho tiempo atrás.

La denuncia alcanza a toda la comisión directiva (ya sea por acción u omisión). La Comisión Directiva es encabezada por el presidente Alberto José Lorenzatti, el vicepresidente Diego Avilés (hermano del intendente), la secretaria Nélida “Cheli” Gómez, la pro-secretaria María de los Ángeles Basurto, la tesorera Cecilia Rodríguez, el pro- tesorero Lisandro Zúgaro, el 1° vocal titular Hernán Nicolau, el 2° vocal titular Martín Corvalán y el 3° vocal titular Nicolás Chevallier.

La respuesta de la Comisión Directiva ha sido muy dura. Si bien una vez que se conoció públicamente la denuncia, emitieron un comunicado afirmando que se pondrían a “colaborar en todo lo que se nos requiera y estaremos a disposición de cada solicitud que se nos formule desde la Justicia, convencidos que la mejor manera de preservar las instituciones es actuar con seriedad”; lo cierto es que –en lo concreto- han decidido presionar al Cuerpo Activo de Bomberos, desfinanciándolos progresivamente y quitándoles los recursos elementales para la realización de la tarea diaria. De esta manera, poco a poco, los equipos se vienen deteriorando.

Esto quedó evidenciado el pasado domingo 19 de junio, en un incendio desatado en Estancia Vieja. Los bomberos salieron con la autobomba y un camión cisterna que tiene una capacidad de 6000 mil litros de agua. Este camión sirve de soporte, puesto que la autobomba solo tiene una capacidad de 2.700 litros.

Los bomberos de Tanti ya estaban trabajando en el lugar. Fue un incendio de campo (no vivienda). Allí entra en acción el camión cisterna y a los dos minutos, se le fundió el motor de la bomba.

Por suerte, y gracias al trabajo y el equipamiento del cuartel de Bomberos de Tanti, el incendio fue controlado. Ellos atendieron el incendio con dos camionetas y dos camiones cisterna.

Tras este episodio, los bomberos de Carlos Paz solucionaron con sus propias manos e implementos la avería de la bomba del camión cisterna. No obstante, este vehículo ha quedado con “servicio restringido”. Es decir, solo saldrá a la calle en situaciones de extrema necesidad hasta ser reparado.

Ante la situación de precariedad, los bomberos solicitaron ayuda al cuartel de Villa María, quienes les enviaron una autobomba que tiene una capacidad de 10 mil litros de agua y 3 equipos autónomos. Este vehículo estará disponible hasta el martes.

Temporada de incendios

La temporada de incendios forestales arrancó el domingo pasado. Porque además del siniestro en Estancia Vieja, dos horas después hubo un incendio en Malagueño. Y el jueves pasado hubo un incendio en Bialet Massé.

Cada año, la temporada de incendios forestales arranca antes. La provincia ya se encuentra en alerta amarilla en materia de incendios forestales. La situación de precariedad es extrema. Porque los bomberos están saliendo a dar respuestas con lo que sea. Poniendo en riesgo su propia vida. Por eso decimos que la Comisión Directiva juega con fuego. Porque existen advertencias de la situación en la que se está trabajando, y aun así siguen mirando para otro lado.

Porque hay que dejarlo claro: los bomberos no manejan dinero. Quienes tienen la potestad y la responsabilidad de hacer las inversiones necesarias para garantizar la seguridad del trabajo de los bomberos es la Comisión  Directiva.

Las pruebas

El quiebre de la relación entre la Comisión Directiva y el cuerpo Activo de Bomberos es anterior a la denuncia misma. En diciembre de 2014, cuando Leandro Vilella asume como jefe interino en reemplazo de Marcelo Zornada, desde la jefatura se comenzó a realizar un “balance paralelo” comparando ingresos y egresos generales de toda la institución.

Es allí cuando, en agosto de 2015, se dan con que la cuenta bancaria de Bomberos debería tener disponible al menos 600 mil pesos. El Cuerpo Activo solicita que se adquiera una autobomba y se pague una deuda de 100 mil pesos que se tenía con la Federación de Bomberos para, de esta manera, destrabar la llegada de 16 equipos estructurales.

Lo cierto es que en la cuenta bancaria de los bomberos sólo había un saldo de 5 mil pesos. Ahí es cuando las sospechas del Cuerpo Activo se confirman. La pregunta sobre ¿dónde está la plata? o ¿en qué se gastó el dinero? todavía no han sido respondido de parte de la Comisión Directiva.

Es partir de ese momento que se cortó toda relación. Y la respuesta de la Comisión Directiva ha sido dejar sin insumos a los bomberos. Sólo brinda los recursos mínimos e indispensables para el combustible y la comida. Las inversiones que requiere el cuartel para atender los 1500 llamados de emergencia que reciben al año, han sido totalmente postergadas.

Según un cálculo realizado por los propios bomberos, para estar en condiciones en términos operativos (considerando desde los guantes hasta los equipos estructurales), hacen falta 800 mil pesos, sin contar las inversiones que se requieren en materia de vehículos.

De las solicitudes de equipos dirigidos a la Comisión Directiva, no se ha obtenido ninguna respuesta. Desde octubre del año 2015 no se compra más nada.

Mientras tanto, la Comisión Directiva sigue percibiendo el subsidio nacional (otorgado a través del Consejo Nacional de Bomberos), el subsidio Provincial (otorgado a través del Plan Provincial de Manejo del Fuego), el subsidio Municipal (otorgado por la Municipalidad de Villa Carlos Paz), el cobro de bonos contribución a la ciudadanía, ingresos del negocio de venta y carga de matafuegos; cobro de inspecciones y habilitaciones contra incendios a los comercios y donaciones.

Lo más grave de la situación es que se deja  al Cuerpo Activo de bomberos –“la razón de ser” de las sociedades de bomberos voluntarios, tal como lo expresa la ley 8058- en total desprotección.

En el comunicado que emitió la comisión  directiva en febrero de este año, tras los allanamientos realizados en el marco de la investigación, se comprometió a “realizar una auditoría externa tendiente a analizar la situación financiera de la institución, sus ingresos, sus egresos y la concreción de los balances pendientes”.

Nada se sabe aún de esa auditoría externa.

¿En qué quedó la denuncia?

El 29 de diciembre de 2015, el Cuerpo Activo de los Bomberos denunció a la Comisión Directiva por el “delito de defraudación por administración fraudulenta”. Si bien la intención del abogado que representa a los bomberos, Carlos Nayi, era que la causa sea investigada por la división de Delitos Complejos, por cuestiones de jurisdicción quedó en manos de la Fiscalía N° 2 a cargo de Ricardo Mazzuchi.

La denuncia está dirigida contra toda la comisión directiva (ya sea por acción u omisión). La Comisión Directiva es encabezada por el presidente Alberto José Lorenzatti, el vicepresidente Diego Avilés (hermano del intendente), la secretaria Nélida Gómez, la pro-secretaria María de los Ángeles Basurto, la tesorera Cecilia Rodríguez, el pro- tesorero Lisandro Zúgaro, el 1° vocal titular Hernán Nicolau, el 2° vocal titular Martín Corvalán y el 3° vocal titular Nicolás Chevallier.

En febrero de 2016, la fiscalía resuelve realizar allanamientos en la casa de la tesorera, Cecilia Rodríguez, en la casa de su madre y en la de su amiga, Nélida Gómez (que trabajaba también en cuartel de bomberos), y en el cuartel de bomberos.

Hasta el momento, se les ha tomado declaración al jefe del cuartel de Bomberos, Leandro Vilella, y a la secretaria Julia Maldonado. En tanto, a los integrantes de la Comisión Directiva y principales acusados, todavía no se le ha tomado declaración.

Según se sabe, las pruebas adjuntas en la denuncia tienen que ver con libros de actas duplicados y facturas de compras de distintos elementos (entre ellos electrodomésticos, reparaciones de vehículos, elementos de construcción) que no tuvieron como destino final el cuartel de bomberos. Entre otras de las irregularidades que habría cometido la comisión directiva está la no presentación de balances desde el año 2013.

¿Qué pasa con la autobomba y el camión cisterna?

El cuartel de Bomberos de Villa Carlos Paz cuenta hoy con los siguiente vehículos: 1 autobomba, 1 camión cisterna, 1 unidad de rescate vehicular, 1 escalera mecánica, 1 unidad de incendio forestal, 1 unidad de rescate que se usa para emergencias médicas.

La autobomba tiene rupturas permanentes. Tiene una capacidad de 2.700 litros de agua (que alcanza para apagar el incendio de un ambiente chico). Cada 20 o 30 días, se le rompe algo. Esto es sumamente grave, porque es la primera unidad que sale atender emergencias.

La otra unidad crítica es el camión cisterna, que tiene una capacidad de 6 mil litros. Sirve de soporte de agua para la autobomba. Además, cuenta con algunos elementos para incendios forestales (rastrillos, hachas). Esa unidad hoy tiene una pérdida de aire que hace que se quede sin frenos. A su vez, no tiene cubiertas. De modo que funciona para la ciudad, pero cuando tiene que andar en zona rural, no tiene buena tracción.

Sobre los equipos autónomos de respiración

Los equipos autónomos de respiración son aquellos que les permiten a los bomberos trabajar en atmosferas contaminadas. Es decir, no solo en situación de incendios, sino también en episodios de pérdidas de gas.

El Cuartel de Bomberos de Villa Carlos Paz debería contar con 50 de estos equipos. Actualmente solo tiene tres en estado de ser utilizados. Otros dos fueron enviados a reparar (se rompieron en abril).

Al tratarse de quipos normados, hay un solo lugar habilitado para repararlos: el Consejo Nacional de Bomberos. Al tratar de averiguar cuanto tiempo se demoraría la reparación, los bomberos se dan con la noticia de que la institución debe 3 mil pesos desde hace dos años. De modo que, hasta que esa deuda no esté saldada, no se devolverán los equipos que se enviaron a reparar.

Es decir, de los 50 equipos autónomos con los que deberían trabajar los bomberos, solo están prestando servicio con tres. “Tenemos gente capacitada, pero no contamos con los elementos”, aseguraron desde el Cuerpo Activo.

Nota correspondiente a la edición n° 422 del semanario La Jornada, del 26 de junio de 2015.