Las Comunas del Sur de Punilla, todavía sin ambulancia

Desde el lunes 16 de mayo a las 21 horas, las Comunas del Sur de Punilla dejaron de contar con el servicio de emergencias. La decisión se tomó luego de que el equipo de médicos y paramédicos que tienen su base de trabajo en Mayu Sumaj se reuniera con el jefe comunal Fabián Flores, quien les informó de los escasos avances conseguidos hasta el momento para lograr la firma del convenio con el gobierno provincial.

“Desde la Comuna hemos tomado la decisión de suspenderlo. Nosotros no podemos solventarlo más. Es imposible, económicamente, para esta comuna llevar adelante un servicio que cuesta aproximadamente 200 mil pesos por mes”, expresó Flores a VillaNos Radio.

Vale mencionar que el convenio está vencido desde diciembre del año pasado. El mismo implicaba un acuerdo económico entre la provincia y las cinco comunas del sur de Punilla (San Antonio, Mayu Sumaj, Icho Cruz, Tala Huasi y Cuesta Blanca) para sostener el servicio de emergencias que cubre desde San Antonio de Arredondo hasta El Cóndor.

La unidad sanitaria que realiza esta tarea cuenta con una sola ambulancia y un equipo de 14 personas entre médicos, paramédicos y choferes.

Tras conocerse la noticia de la suspensión, hubo una serie de idas y vueltas donde se habló que de que las autoridades comunales del sur de Punilla habían llegado a un acuerdo y que el servicio se había restablecido. Sin embargo, de manera inmediata, los profesionales de la salud salieron a desmentir la información.

“Ante las noticias que circulan sobre la supuesta regularización del servicio de ambulancia en Punilla Sur, no está confirmada la firma del convenio con provincia. Tampoco se resolvió la situación de precariedad laboral y salarios atrasados con el personal de la ambulancia en la reunión que mantuvieron con los jefes comunales”, señalaba el comunicado difundido.

Comunas del Sur - protesta ambulancia 21-05-16 (1)Al cierre de esta edición se estaba concretando un corte de la Ruta 14 con la participación de cerca de 80 vecinos, que volvieron a exigir la continuidad del servicio. “Lo que me convoca es la desidia del Estado frente a una emergencia poblacional  que es el tema de la salud. Estamos sin cobertura médica. Acá están los enfermeros y choferes  que los vienen bicicleteando con que el convenio ya está firmado, y esto no es así”, expresó Martín, vecino de Cuesta Blanca.

Hilda Argañaraz, integrante del equipo de salud, ratificó que hasta el momento, el problema no ha sido resuelto. “Hasta ahora no tenemos ninguna novedad. Seguimos en la nada. Estamos esperando a ver qué sucede la semana próxima. Lo importante es que la gente sepa que la ambulancia no está funcionando”, expresó.

En cuanto a la deuda que se tiene en salarios atrasados, Argañaraz dijo que supera los 200 mil pesos. No obstante remarcó que hoy en día es fundamental que se le dé continuidad al servicio. “El tema no es tanto la deuda. El mayor problema que tenemos es que nosotros queremos que vuelva la ambulancia, que es vital para esta zona. Ayer llegó una niña convulsionando al dispensario donde trabajo. Si no hubiéramos estado en ese momento, esa niña se hubiera muerto. Es lamentable lo que está pasando”, consideró.

En la movilización también estuvo presente la concejala de San Antonio, Gloria Verra (UPC) quien expresó: “Como vecinos nos convoca el hecho de tener que defender nuestros derechos y solicitar que el tema de asistencia para urgencias y emergencias a través de una ambulancia, se concrete”. La edila también habló de la situación particular en la que se encuentra el municipio de San Antonio que hasta junio de 2014 contaba con el servicio de emergencia de AMI. “Exigimos que el municipio tenga cobertura, como la tuvo siempre. Porque dentro de los recortes en salud que hicieron, también nos dejaron sin servicio”, denunció.

 

“Tenemos el compromiso del gobierno provincial”

Tras las idas y vueltas, lo que está claro es que el convenio aún no ha sido firmado y que por estos días, el servicio de ambulancia no se está prestando. No obstante, la jefa comunal de Cuesta Blanca, Andrea Jordán, sostuvo que a partir de las gestiones realizadas por la legisladora Mariana Caserio, se logró tener el “compromiso” del gobierno provincial de que se le dará continuidad al servicio.

“Tenemos el compromiso, por parte de la provincia, de que el convenio se va a firmar. Una parte la afrontará la provincia y otra, nosotros (por las cinco comunas y municipios del Sur de Punilla)”, aseguró y puntualizó que la provincia está dispuesta seguir aportando el 50%.

Lo que está pendiente de resolver es la definición de cuánto dinero implica garantizar la continuidad del servicio. En este sentido, Jordán indicó que como hasta el momento todo el manejo de fondos lo estaba realizando la comuna de Mayu Sumaj, el resto de las autoridades desconocían la situación económica por la que está atravesando el servicio.

“Estábamos ajenos a la situación. No sabíamos que al personal se le estaba debiendo  bastante dinero de su sueldo”, dijo e incluso indicó que algunas autoridades tampoco sabían que el convenio estaba vencido. Se enteran de esta situación a partir del encuentro que esta semana tuvieron con el equipo de médicos y paramédicos.

“En realidad, el convenio no se termina firmando en ese momento porque no estaban dadas las condiciones debido a que nos faltaba información”, reconoció Jordán.

Lo cierto es que, lo que queda por precisar es cuánto sale mantener el servicio. Y esos números debe precisarlos el jefe comunal de Mayu Sumaj, quien se comprometió a entregar esa información al ministerio de Salud el pasado viernes. “Él ha dicho que el servicio sale 200 mil. Antes habló de 250 mil. Eso le dice él y se hace cargo él, porque nosotros al día de hoy, no hemos recibido fehacientemente cuanto sale el servicio”.

La jefa comunal sostuvo que una vez precisado los números (cuánto vale hoy el servicio y cuánto se le adeuda a los trabajadores), de allí se podría definir la firma del convenio. Y afirmó que el martes o jueves de la semana que viene, serían días claves.

Mientras tanto, sugirió a los profesionales y vecinos a que bajen los decibeles del reclamo. “Solicitamos que flexibilicen la negociación. Si cada uno se queda con lo que quiere, así no vamos a poder llegar a nada. Estamos frente a una negociación donde ambas partes tenemos que ceder en algo, porque así no vamos a llegar a ningún lado”, dijo.

 

Nota correspondiente a la edición n° 417 del semanario La Jornada, del 22 de mayo de 2015.

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