El Pleno de Gobierno que se desarrolló el lunes pasado, a puertas cerradas como siempre, terminó en escándalo.
La reunión, planteada en la Carta Orgánica como un espacio para el trabajo conjunto y el debate de temas relacionados a la gestión de gobierno, se inició pasadas las 10 con la presencia del intendente Esteban Avilés, los funcionarios que integran su gabinete (a excepción del secretario General Sebastián Guruceta y el secretario de Turismo Sebastián Boldrini) y la mayoría de los concejales de los diferentes bloques (solo faltó Omar Ruiz, por cuestiones de salud).
Transcurridas las tres horas previstas en la ordenanza reglamentaria, los ediles del interbloque Cambiemos (Gispert, Molina, Sequeira y Lenci) decidieron abandonar el recinto cuando el oficialismo se negó a programar una nueva reunión para otro día con el objetivo de finalizar el tratamiento de todos los puntos previstos en el temario, entre ellos la situación de los bomberos voluntarios, transporte urbano, gas natural y discapacidad.
Se dijo que el intendente Avilés y sus laderos ‘estiraron’ todo lo posible los temas que habían propuesto con el objetivo de que no quedara tiempo para tratar adecuadamente los que había pedido la oposición.
“Casi tres horas estuvimos escuchando los informes municipales. Media hora hablaron de la fiesta de apertura”, relató, con fastidio, Gispert. Y precisó: “tratamos el tema del ACA por algunas construcciones que no estarían en regla, y cuando empezamos con el tema del agua ya se habían cumplido las tres horas que establece la ordenanza y pedimos seguir la reunión otro día”.
“No quisieron y esto tiene que ver con la política de Avilés de avanzar a los empujones. Hace poco el oficialismo declaró de Interés Turístico un proyecto inmobiliario sin tener el expediente, que después llegó y no explica nada. Además, ahora usan la mayoría para cortar el debate en las sesiones, y en el Pleno tampoco respetan lo que dice la ordenanza”, resumió.
Para Lenci, en tanto, el Pleno de Gobierno como está planteado, “es sólo propaganda de la gestión”.
“El tratamiento de todos los puntos que había planteado el ejecutivo llevó más de dos horas y media, y la ordenanza establece que el Pleno debe durar tres horas como máximo. Quedaba media hora para el resto y pedimos que se reprograme la reunión para de esa manera tener el tiempo suficiente, ya que pudimos tratar solo dos. Pero ni el ejecutivo ni la presidenta dieron lugar a esto. Es una lástima que no se hayan tomado los temas de la minoría con la misma intensidad con la que tomaron los del ejecutivo”, expresó a Radio Cyber.
En esta línea consideró que, “evidentemente la estrategia era dejarnos poquito tiempo para poder abordar los temas de mayor profundidad”.
“Respetar lo que establecen las ordenanzas y respetarnos es parte esencial de la democracia. No es menor que hayan impuesto de manera arbitraria continuar con el Pleno fuera de hora siendo que los temas que faltaban eran los que habíamos planteado nosotros. Dejarnos como victimarios es exagerado”, subrayó.
“Fue más de lo mismo, sin la expectativa de poder consensuar políticas ni que el oficialismo escuche lo que la oposición está planteando. Ojalá el próximo sea abierto al público y se puedan discutir realmente políticas de Estado y se puedan resolver los problemas de los vecinos”, opinó.
Desde el bloque de Unión por Córdoba, la concejala Laura Orce se diferenció de sus pares de Cambiemos.
“La razón expuesta por Gispert para pedir otra reunión es que tenía que viajar a Río Cuarto y que el Pleno ya se había extendido tres horas. Creo que no corresponde. Si hay que quedarse cuatro o cinco horas o lo que sea necesario, hay que quedarse”, dijo.
“Lamento profundamente que el interbloque haya decidido levantarse. Era necesario y hubiese sido importante que se quedaran. Espero que se labre el acta y tengamos documentado lo que se dijo y lo ocurrido”, afirmó.
Asimismo consideró que, “desde el momento en que el Pleno no es público nunca me voy satisfecha. Y menos por lo que se genera posteriormente”.
En este sentido, adelantó que volverá a solicitar el tratamiento “de manera inmediata” de su proyecto para que los Plenos de Gobierno sean abiertos. “Lo mandaron de vuelta a comisión pero quiero que sea votado. Hay que dar una respuesta”, insistió.
La postura del oficialismo
Tras la finalización del Pleno de Gobierno, la presidenta del Concejo de Representantes, Alejandra Roldán, hizo un balance positivo y criticó a los ediles que se retiraron. “Estamos muy satisfechos, hemos terminado el Pleno luego de casi cuatro horas y media de debate y trabajo conjunto, y me parece importante destacar que al momento de armar el temario, el intendente Municipal Esteban Avilés aceptó tratar todos los puntos propuestos por la oposición, acompañándolos incluso de documentación.
Lamentablemente el llamado ´interbloque` conformado por los ediles Gispert, Sequeira, Molina y Lenci, se retiró aduciendo que el límite es de tres horas y que tenían cuestiones personales, esto es sorprendente ya que estaba el gabinete con los funcionarios y los concejales tratando temas que ellos mismos habían propuesto. De todas maneras, continuamos con el Pleno y destacamos por supuesto a los ediles del Pro, Marcelo Cuevas, y del PJ María Laura Orce, que se quedaron hasta que concluyó este encuentro porque sí entienden de qué se trata un Pleno de Gobierno”, expresó.
Por su parte, el intendente Avilés destacó que al gobierno de Carlos Paz Unido “que trabaja con mucha pluralidad y responsabilidad en cuanto a los plazos que establece la Carta Orgánica, cumpliendo con los planteos de cada concejal”.
“Para nosotros este es un tema de Gobierno, y si bien tenemos la facultad de armar un temario con prioridades, nos parece que todos los puntos son importantes tanto del legislativo como del ejecutivo, por eso nos pusimos a disposición. De eso se trata el Pleno de Gobierno”, sostuvo.
Nota correspondiente a la edición n° 446 del semanario La Jornada, del 11 de diciembre de 2016.
