A casi dos semanas del asesinato de Ingrid Vidosa, la causa se encamina a esclarecer qué sucedió aquella fatídica tarde del lunes 24 de agosto en Villa Carlos Paz. La muchacha murió a causa de un disparo proveniente de un arma de fuego calibre 22 y su cuerpo fue hallado un día más tarde en el Cerro de la Cruz.
Hasta ahora, el único imputado por la muerte de la joven de 25 años oriunda de la localidad de Mayu Sumaj es su novio Marcos Haye, quien se encuentra detenido en la cárcel de Bouwer. La semana pasada cambió de abogado defensor, y Julio Deheza reemplazó a Marcela Giraudo (ver aparte).
“Está pulverizada la coartada de este hombre”
El abogado querellante de la familia de Ingrid, Carlos Nayi, aseguró que hay datos probatorios que “fulminan” la coartada del imputado por femicidio y que ayudan a dilucidar lo sucedido.
El letrado indicó al programa Cara y Cruz (Radio Universidad) que gracias a un análisis con la técnica de barrido electrónico se pudieron hallar restos de pólvora, plomo, bario y antimonio en las manos y la ropa de Haye, lo que determina que el acusado manipuló recientemente un arma de fuego.
Además, hay dos elementos claves que lo ubican a Haye en la escena del crimen al presunto momento del homicidio, contrariamente a lo que el novio de Ingrid hizo referencia en su declaración. Según los forenses, la data de muerte de Ingrid se ubica entre las 19.20 y 21.
“A las 19 existe una testigo presencial que conoce a Marcos Haye, que describe su vestimenta y que lo sitúa en ese horario ingresando con Ingrid al Cerro de la Cruz (…) Además, hay una filmación que a las 19.08 muestra el ingreso de ambos al Cerro, con la misma vestimenta que describe la mujer que trabaja en un establecimiento escolar próximo al lugar (…) Está totalmente pulverizada la coartada de este hombre que intentó instalarse al momento de los hechos en otro lugar”, remarcó Nayi.
El abogado de la familia subrayó además que desde el punto de visto psicológico se reconstruyó un perfil “violento, obsesivo, celoso y dominante”.
“Considero que el caso está esclarecido”, concluyó Nayi, quien adelantó que en caso de llegar a juicio solicitará la prisión perpetua para Haye.
Otra arma y pericias
El domingo pasado, a escasos metros de donde fuera hallado el cuerpo de Ingrid Vidosa, uno de los perros que participaba de las tareas de rastrillaje encontró un arma calibre 22, que sería compatible con la bala que terminó con la vida la joven.
Esta arma se suma a otra, hallada en la casa del acusado, en Tanti.
Jorgelina Gómez, secretaria de la fiscalía que lleva adelante la investigación, indicó que “aún no están los resultados” de las pericias balísticas, y aclaró que “las partes pueden proponer sus propios peritos de control”.
El único acusado cambió de abogado defensor
Marcos Haye (32), único detenido por el asesinato de Ingrid Vidosa (25), cambió de abogado defensor.
Según se conoció, el novio de la víctima, que está imputado de “homicidio agravado por el vínculo”, también denominado “femicidio”, es ahora defendido por el letrado Julio Deheza, quien reemplaza de esta manera a Marcela Giraudo.
Se espera que esta semana, una vez que estén los resultados del peritaje sobre las dos armas halladas en el marco de la investigación, sea llamado a declarar.
“Grullas por la paz, la memoria, la verdad y la justicia”
El asesinato de Ingrid Vidosa volvió a sacudir a la comunidad. Tras la segunda movilización del miércoles 26 de agosto, en solidaridad con la familia y para reforzar la necesidad de acciones que habiliten la emergencia en el tema de violencia de género, muchos asistentes se mostraron asombrados por la escasa participación de los vecinos.
Las semejanzas y diferencias que el caso de Ingrid presenta con los casos de Andrea y Hernán, habrían ameritado una muestra más contundente de cohesión ciudadana.
En ese balance de cierto desencanto popular, en un intercambio vía redes sociales, a partir de alguna frase que intentara dar explicación a la desmovilización, alguien que participó en la marcha sintió la necesidad de generar una acción que cristalice una ruptura con la indignación vacía de contenido. Y en un ‘muro’ apareció una frase de Emilio Iosa, el médico carlospacense que encabeza la fundación Deuda Interna y que dice algo así como: “(…) la indignación no nos hace más sensibles ni más buenos. Que no es el sólo hecho de sentir que algo nos indigna lo que nos da tranquilidad de tener conciencia social. Hay que llevar la indignación al acto”.
Tal vez un disparador necesario para que surgieran algunas ideas e intercambios y que finalmente tomó la forma de un evento que lleva por nombre “Grullas por la paz, la memoria, la verdad y la justicia” y que pretende intervenir las calles de la ciudad el domingo 20 de septiembre durante los festejos por el Día de la Primavera.
La iniciativa consistirá en repartir grullas de papel, un símbolo oriental de la paz y muy ligada a los derechos humanos, como muestra de que la sociedad no se detiene, pero está atenta a los hechos que nos conmocionaron y que es necesario seguir movilizados en las formas que se pueda.
No hay una organización de ningún tipo. Sólo una idea que se publicó, tomó forma en un evento de los que se estilan crear en Facebook y se fue difundiendo en la medida de las ganas de los participantes de hacer su aporte con su grulla y con su presencia el día señalado.
La invitación es para todos los que se quieran sumar, y se espera que los chicos de los colegios de la villa se entusiasmen y participen especialmente dada la fecha que se eligió y que es tan significativa para los estudiantes.
En el muro del evento (https://www.facebook.com/events/877841415640770/) se pueden encontrar tutoriales para los que se animen a plegar su grulla con la técnica origami, y ya se pueden ver las fotos de los que se fueron animando.
También allí se irán publicando las novedades que vayan surgiendo hasta el día en que se concrete la intervención.
Este domingo, desde las 16 en la Costanera (frente a Largo Juárez), habrá una juntada ‘grullera’. La convocatoria es abierta y sólo hay que llevar cuadrados de papel.
Nota correspondiente a la edición n° 383 del semanario La Jornada, del 06 de setiembre de 2015.
