El fuego iniciado en el mediodía del viernes en el basural municipal de la localidad de Capilla del Monte terminó, con el paso de las horas, en la imputación del intendente Gabriel Buffoni y también de su secretario de Gobierno.
La propagación del fuego, que incluso obligó a un corte de ruta, tuvo en vilo a bomberos y autoridades varias horas, aunque se fue controlando con el paso del tiempo.
“Vamos a seguir colaborando. Entiendo que el basural es municipal y yo soy el intendente, y no cabe otra que imputarme. Pero no hay ningún intendente que esté con una caja de fósforos, prendiendo fuego”, graficó este lunes el mandatario, a la espera de su declaración judicial en el caso, el jueves próximo.
Durante la entrevista con el programa Cara y Cruz, deradio Universidad, remarcó que “el municipio en ningún momento autorizó la quema” y se desligó de la “intencionalidad” en el hecho.
El argumento central es que “el basural tiene 13 kilómetros de perímetro y hay accesos por todos lados”, por lo que el control, a cargo de “becarios que cumplen sus tareas cuatro horas al día y con una disponibilidad propia para cumplir horario”, excede a la comuna.
“Tenemos controlada la entrada principal, realizamos un listado, pero también recibimos basura de localidades vecinas. Nuestra planta de reciclaje es para cartón, vidrio y PVC, pero es un basural de cincuenta años, fundado sobre piedra y es imposible el enterramiento. A su vez, tenemos un éjido muy chico y encajonado por las sierras”, sentenció.
Buffoni indicó, en tal sentido, que “la solución global la tiene que dar la Provincia”, y le apuntó al “volcadero” de basura en Cruz del Eje, al que iba a adherir Capilla del Monte.
