En el marco de una tensa sesión, el Concejo de Representantes sancionó el jueves pasado y por mayoría, una ordenanza que reglamenta el funcionamiento de las canchas de fútbol en Villa Carlos Paz.
Por este tema se habían presentado dos despachos. La única diferencia era el horario de cierre y sobre eso giró el debate. El interbloque Cambiemos proponía el horario de 8 a 13 y de 16 a 22, y el avilescismo de 9 a 13 y de 16 a 23 hs.
La discusión se extendió por casi dos horas, durante las que los argumentos se mezclaron con las chicanas políticas.
La presidenta Alejandra Roldán realizó una encendida defensa del fútbol como deporte y el derecho de los trabajadores a poder disfrutar de estas actividades. En esta línea, advirtió que de aprobarse el horario que pretendían los vecinos (22 hs), muchos iban a verse imposibilitados de practicarlo.
Omar Ruiz (CPU) recuperó la posibilidad de realizar una audiencia pública para escuchar a todos los sectores involucraos, y Laura Orce (UpC) pidió –sin suerte- que el punto volviera a comisión para intentar una salida consensuada.
Marcelo Cuevas (PRO) sostuvo que la definición no se podía extender y que había que dar una respuesta sin más dilaciones.
Hugo Bustos (CPU) basó sus argumentos en normativas vigentes en otras localidades que incluso autorizan el desarrollo de la actividad bastante después de las 23.
Gispert, por su parte, hizo alusión a uno de los puntos centrales que plantean los vecinos en torno a la falta de habilitación comercial de las canchas de fútbol que funcionan tanto en el Club Carlos Paz como en el complejo ubicado sobre calle Andrea del Sarto.
“Todavía estamos pidiendo los expedientes de la situación más crítica”, denunció.
Sobre el horario, reconoció que, “no hay posibilidad de resolver en su conjunto el conflicto, no vamos a poder lograr consenso”.
“Ninguna medida que tomemos va a haber 100% de acuerdo, pero está claro que si votamos 23 hs. algunos sectores van a estar más contentos y más escuchados. Hay que decidir cuál sector queremos que nos escuche”, afirmó en alusión a los vecinos.
Tras el acalorado debate, el punto se votó primero en general (todos a favor) y luego artículo por artículo. Hubo unanimidad en todos, menos en el del horario.
Específicamente en relación al artículo 7, se pusieron a consideración las dos propuestas. Primero se votó la impulsada por Gispert que consiguió seis votos (además del propio lo acompañaron Gustavo Molina, Oscar Sequeira, Natalia Lenci, Omar Ruiz y Laura Orce) contra los seis del avilescismo. El doble voto de la presidenta sentenció su rechazo.
Después se votó la moción del oficialismo que, con los votos de Roldán, Mirtha Alessio, Carla Livelli, Soledad Zacarías, Hugo Bustos y Marcelo Cuevas y el doble voto de la presidencia también ante el empate en seis, se aprobó y el horario quedó establecido de 9 a 13 y de 16 a 23 hs.
Los numerosos vecinos, sobre todo de barrios La Cuesta y Costa Azul Sur, que desde hace años vienen denunciando la difícil situación que viven diariamente por estos emprendimientos, se mostraron disconformes con esta decisión. Pedían un tope en el horario de cierre a las 22 y que el municipio ejerza el poder de policía y controle.
Asimismo, y ante la decisión consumada de sancionar esta ordenanza, no descartaron ir por la vía judicial (ver aparte).
Cuando finalizó el tratamiento del punto se abrió un cuarto intermedio y varios vecinos se acercaron para reclamarles a los concejales la decisión que habían tomado. Algunos hablaron con Roldán a quien tildaron de irrespetuosa, y otros encararon a Cuevas, de quien dijeron que es un hipócrita.
A raíz de esta tensa situación debió intervenir personal de Seguridad VCP que estaba en el lugar.
Nota correspondiente a la edición n° 450 del semanario La Jornada, del 29 de enero de 2017.
Y claro, los que votaron hasta las 23 seguramente no tienen una cancha de futbol al lado.
Ya las 22 me parece excesivo si la cancha esta en un barrio. En mi opinion deberia ser 21hs el cierre. (en realidad, no se deberia habilitar una cancha al lado de una casa)
Para quien cena a las 21, debe ser hermoso cenar todos los dias con hinchada. Que paz carlos!
Y sino hagamos como los paises con leyes de verdad: Que esten habilitadas en el horario que se les cante, pero donde el ruido de la actividad entre en alguna casa del barrio, el emprendimiento se clausura.
De esa forma, el dueño de la cancha prosigue con su negocio pero tiene que mantener a raya a sus clientes.