En respuesta a los reclamos formulados por médicos del hospital Gumersindo Sayago y de los diferentes dispensarios por mejoras en su relación contractual con el municipio, el departamento ejecutivo elevó al Concejo de Representantes un proyecto de ordenanza que prevé el pase a contrato administrativo de los profesionales que se desempeñen como locadores de servicios con cinco años de antigüedad como mínimo.
En medio de una semana con fuertes declaraciones cruzadas entre funcionarios e integrantes de la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS), el jueves los médicos resolvieron aceptar la propuesta y levantar las medidas de fuerza, luego de más de dos semanas con asambleas a la mañana y a la tarde.
El proyecto tomó estado legislativo en la sesión del jueves y se espera que sea aprobado la semana próxima para comenzar a regir con los nuevos contratos que se firmarán desde julio.
Según se precisó, ‘más de 40’ médicos de un total de 111 en condición de monotributo estarán en condiciones de mejorar su situación laboral.
Los profesionales lo consideran “insuficiente” ya que quieren eliminar completamente el sistema de locación de servicios (salvo casos excepcionales), pero reconocen que es “un avance”. Al mismo tiempo, adelantaron que insistirán con el pliego de reivindicaciones que incluye cuestiones edilicias y otras vinculadas al pago extra por feriados, quitar las guardias de 48 horas y el reconocimiento del título de especialistas.
“Es lo que se puede pagar”
El proyecto oficial que prevé el cambio de modalidad contractual -por opción- para los profesionales de la Salud vinculados mediante locación de servicios se anunció al martes por la noche, tras una reunión de la que participó el intendente Esteban Avilés, los secretarios de Salud, Rubén López, y Economía, Daniel Gilli, e integrantes del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM).
Al día siguiente, López ofreció una conferencia de prensa con el STM donde atribuyó a un “interés político” los reclamos que llevan adelante los médicos del hospital Gumersindo Sayago.
Tras el encuentro con los medios, López y el secretario de Gobierno y jefe del área de Recursos Humanos, Juan Villa, concurrieron al hospital donde mantuvieron una reunión con un grupo de profesionales. Allí, les dijo que la propuesta “no es caprichosa, es lo que la ciudad puede. Vamos a hacer un esfuerzo sobrenatural porque realmente no contamos con los recursos. Vamos a tener que salir a gestionar los recursos económicos para solventar esta ordenanza de la provincia o algún lado”. Según precisó, se trata de unos tres millones de pesos más por año, que no estaban presupuestados.
A tono con las agresivas declaraciones que formulara Avilés en algunos medios, López insistió con su teoría de que el reclamo de los médicos se debió a “intereses políticos” y apuntó contra las delegadas de la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS).
“Sin duda hay intereses políticos. Es un conflicto político. No hay motivos razonables para que estén con medidas de fuerza”, opinó. Y amenazó con aplicar sanciones si se mantenían las asambleas.
“Impresentable”
El viernes, y con la situación normalizada al menos en lo que se refiere a la atención de los pacientes, Ariel Gómez, secretario General de la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS), consideró que la propuesta que realizó el ejecutivo “es insuficiente pero es un paso adelante”.
El gremialista remarcó que el objetivo es que “todos” los profesionales que quieran pasen a contrato y adelantó que volverán a presentar el “pliego de reivindicaciones” que incluye cuestiones de infraestructura edilicia y reclamos como eliminar las guardias de 48 horas y lograr el pago diferenciado de feriados y fines de semana.
“Vamos a seguir la lucha. Lo que queremos es terminar con esta precarización absoluta y pasar a contrato a todos, la locación de servicio es algo excepcional”, dijo al espacio ‘Off The Record’ (VillaNos Radio 100.7).
Gómez se refirió, además, a los dichos del secretario de Salud, Rubén López, quien había asegurado que el municipio no reconoce a la UTS porque no habían presentado la documentación que acredite su personería gremial. “Eso es irreal y mentiroso, le fue entregada en mano”, aclaró.
En cuanto a la actitud del intendente Esteban Avilés, quien en medio del conflicto salió a descalificar personalmente a las delegadas de la UTS en el hospital Sayago, Gómez opinó que, “es impresentable”.
“Pensé que era una persona más preparada. Apelar al golpe bajo, a las chicanas y a la descalificación personal para desviar el foco de la discusión es impresentable”, sostuvo. Y relató que si bien las delegadas “quedaron golpeadas” por las críticas, “recibieron el apoyo de todos sus compañeros y están fuertes”.
También habló del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM), del que dijo que es “funcional a la patronal”.
“El STM no tiene idea de la realidad de los trabajadores de la salud. Salen en la foto del acuerdo, pero esto es un logro de la UTS”, remató.
La lucha continúa
Tras el acuerdo y el levantamiento de las medidas de fuerza, aparecieron en el hospital Gumersindo Sayago algunos carteles donde los médicos advierten que, “lograr un contrato digno no debe hacer olvidar los reclamos no cumplidos”.
Guardias de no más de 24 horas, pago diferenciado de feriados y fines de semana, adicional por guardias de 24 horas, Semana Sanitaria, diferenciación de contratos de locación por antigüedad, reconocimiento de título de especialistas, ART, obra social y aguinaldo, figuran en el tope de las reivindicaciones reclamadas.
También está impresa la durísima carta abierta que el colectivo de profesionales dedicó al intendente Avilés y al secretario de Salud, Rubén López, titulada “¿Usted volaría en un avión cuyo piloto no duerme por 48 horas?”.
Sin embargo, y tras reclamar “basta de chicanas políticas”, aclararon que, “no queremos confrontar con el intendente, queremos salud en serio y de calidad”.
Nota correspondiente a la edición n° 415 del semanario La Jornada, del 08 de mayo de 2015.
