Por Hernán Ibar
El pasado fin de semana la atleta carlospacense logró quedarse con el segundo puesto en el Torneo Argentino de Fisicoculturismo y Fitness dentro de la categoría “Body Grand Master” para meterse de esta manera entre las mejores del país.
Ha sido un año más de crecimiento para Liliana Contreras, agregándole buenos resultados a su “flamante” historial donde ya se ha colgado varias medallas. Desde aquel inicio en Campana viendo de qué se trataba esta disciplina hasta el día de hoy metiéndose de lleno en la élite del “fitness” y “culturismo”.
Qué decir del camino transcurrido, pasando por competencias provinciales, nacionales y hasta destacándose en la “Copa Mercosur” donde la representante del “Mega Gym” se ha ganado el reconocimiento de las colegas dentro de cada torneo al que se presenta.
Con el lema “motivación” siempre presente día tras día, y con un gran sacrificio para cumplir con los requisitos de cada certamen, la deportista de Villa Carlos Paz no se achica asumiendo la responsabilidad que desde hace tiempo le está dando sus frutos con las victorias y podios logrados en el último tiempo.
En este presente, es la gran figura que tiene la ciudad en el Fitness y Fisicoculturismo, siendo una de las precursoras de este deporte en la villa serrana.
Simple, amable y clara a la hora de hablar, Liliana Contreras se muestra como es, por eso mismo hoy no sigue siendo una profe más, que además de sus brillantes actuaciones por Argentina, ya logró el cariño y sentimiento de sus alumnas, que la acompañan diariamente en el gimnasio y hacen que la carlospacense se nutra de ellas para poder seguir transitando las pasarelas de los campeonatos que le toque ir.
Pero aún lo mejor está por venir y cumplir su gran sueño de traspasar la frontera para poder representar al país poniéndose la “celeste y blanca” ante las mejores del mundo…
– ¿Cuáles fueron las conclusiones del Argentino donde te quedaste con la segunda ubicación?
– Estoy muy contenta la verdad ya que es un torneo donde se presentan las mejores atletas del país, es el más importante del año, donde se hace el preselectivo para el sudamericano así que estar en un segundo lugar a este nivel de competidores es un orgullo. Es una escalera deportiva que estoy haciendo con mucho esfuerzo y trabajo pero siempre ascendente así que muy feliz.
Las conclusiones que me quedan es que uno aprende de todo, siempre nos preparamos para ganar, pero un segundo lugar te pone a un nivel de chicas que tienen mucha experiencia, con competencias en su carrera, y uno si sabe observar y capitalizar todo hay que aprovechar la oportunidad para seguir creciendo ya que es todo fantástico. Siempre a todos los torneos que voy aprovecho todo, las preparaciones de las compañeras, estar ahí una al lado de la otra se toma como aprendizaje para ver si estamos en buen camino o hay cosas para mejorar, así que es muy enriquecedor.
– ¿Cómo viste al fitness a nivel nacional?
– En el país hay un nivel altísimo, el atleta argentino está muy bien visto en el ranking, es muy disciplinado, tenemos acceso por suerte a una muy buena suplementación, hay cosas excelentes, y además tienen las condiciones para organizarse, más allá de como esté el país, con los alimentos y entrenamientos. Por ahí hay otros países que no tienen la condición social que les permita abocarse solamente a un deporte sanamente, mas allá de los conflictos que tenemos hoy, podemos estar en una cierta paz que uno puede organizar vivir, comer, entrenar con algunas dificultades, tropiezos pero Argentina lo permite y algunos atletas viajar al exterior.
El argentino es un atleta muy bonito en el resto del mundo.
– ¿Cuál es la modalidad que tiene la categoría en la cual te desempeñás?
– Cada categoría tiene lo suyo, su reglamento, caminata diferente, poses, mallas y mi divisional es algo intermedio, tiene la caminata pero a su vez tiene la trabada muscular donde se tiene que ver el trabajo de piernas, la amplitud de la espalda, el volumen del hombro, se tiene que ver algo donde impacte un poco el volumen muscular. Hay otras categorías que son con movimientos más sinuosos, la masa es más pequeña. Dentro del fitness la caminata, la gracia, el movimiento, el no dejar de lado la feminidad, es lo principal, que es lo que con el culturismo de los primeros tiempos se perdió mucho pero el fitness lo rescató.
– ¿Qué se toma en cuenta por parte del jurado para determinar un ganador?
– Últimamente se está priorizando el tema de la simetría, cambia en cada categoría, pero dándole importancia a la simetría del largo de piernas, tronco, brazos, cómo está desarrollado el lado derecho con respecto al izquierdo. En las poses tiene que estar el cuerpo favorecido también, si uno posa mal se ve en la musculatura, pero principalmente tiene que haber una simetría. Entonces como es un deporte que se busca la belleza, lo más perfecto y prolijo posible, dentro de ese trabajo muscular tiene que ser saludable y en el aspecto se nota.
– ¿Cómo fueron tus inicios en esta disciplina?
– Siempre hay recuerdos, mi primer torneo fue en Buenos Aires, porque mis entrenadores son de allá, ellos me propusieron hacer un torneo en Campana, la verdad que no iba con ninguna expectativa, fui como para probar, ver de qué se trataba y me sorprendí con un segundo lugar desde la primera vez y eso me embaló muchísimo para lo que vino después. Así que tuve suerte desde el comienzo.
– ¿En cuánto tiene que ver la “motivación” para desarrollar el fitness?
– Es todo, porque se entrena siempre, los dolores musculares aparecen todos los días, generalmente hay que dejar de comer cosas que a uno les gusta, se come sano pero ya cuando lo miramos desde la competencia nos cuidamos un poco más. El sacrificio después se ve en lo que es la estética y lo que a uno le gusta y si uno no está motivado para algo es ahí donde la mayoría de los atletas o que intentan, claudican o dejan el deporte, entonces la motivación es algo muy importante, el ancla donde tenés que apuntar, seguir y tomar fuerzas.
– ¿Qué sueño te queda por cumplir?
– Sueños sí, yo soy netamente y de corazón “profe”, líder de guía, la profe que te dice cómo tenés que entrenar, comer, sentirte bien, ir de la mano de una vida saludable y cambio de hábitos, quizás este deporte lo que me dio es el reconocimiento y la confianza que mucha gente antes no me tenía. Por ahí en el pasado era una profe más, una buena profe, eso me abrió el corazón y la predisposición de mucha gente y eso lo rescato y lo disfruto muchísimo.
¿Qué me queda por cumplir?. Pasar el país, estamos cerca, la estoy luchando aun, pero es un nivel alto y como siempre digo el rival más grande que hay que vencer son las otras atletas argentinas ya que tienen un nivel altísimo. Cuando yo sea una de las mejores argentinas sé que me va a ir muy bien porque hay buen nivel en Sudamérica pero en Argentina somos excelentes. Entonces cuando me meta en la elite me quedará solo eso, representar al país en el exterior, llevar la bandera celeste y blanca.
Nota correspondiente a la edición n° 431 del semanario La Jornada, del 28 de agosto de 2016.
