Por Jorgelina Quinteros
El sábado 11 de marzo las amigas de Andrea Castana organizaron una subida al cerro de La Cruz que comenzó a las 14.30 y donde participó un puñado de vecinos. Posteriormente, a las 18, comenzó una marcha desde el centro de Carlos Paz hasta la base del cerro. “Para que el grito de justicia llegue el cielo”, fue la consigna de esta convocatoria.
Como en todas las movilizaciones anteriores, los familiares de Hernán Sánchez acompañaron el reclamo de justicia por Andrea Castana, a pesar de que ellos decidieron no marchar más a dos años del hallazgo del cuerpo del fotógrafo.
El viernes 13 de marzo de 2015 fue el fatídico día en que fueron encontrados los cuerpos sin vida de Hernán Sánchez (32) y Andrea Castana(35).
Hernán era buscado por su familia desde el 19 de diciembre de 2014 y fue encontrado de casualidad durante la búsqueda de Andrea. Ella desapareció del Cerro de la Cruz el 11 de marzo a la siesta.
Desde aquel momento, los familiares y amigos de Andrea y Hernán han sostenido incondicionalmente la lucha por el esclarecimiento de los casos y el pedido de justicia.
El ascenso al cerro se llevó a cabo por segundo año consecutivo en el horario en que Andrea inició el trayecto que le impidieron finalizar.
Un grupo encabezado por sus amigas recorrió el camino que lleva a la Cruz. En la estación 9, al comienzo del sendero donde se encontró su cuerpo, colocaron dos cintas cruzadas con la leyenda ‘Prohibido pasar – Andrea Castana 11-03-17’ y un lazo negro.
Luego, a las 18, unas 60 personas marcharon desde el centro de la ciudad hasta el pie del cerro. Allí estuvieron presentes familiares de la joven.
De la multitudinaria marcha del 15 de marzo de 2015 sólo quedan recuerdos. Unas cinco mil personas participaron y la base del cerro fue un mar de gente. A dos años, sólo persiste un reducido grupo de familiares, amigos y vecinos movilizados por la injusticia, la impunidad y el horror.
La movilización finalizó con un acto. Nadia Corzo y Macarena López Salvans, sus amigas incondicionales, agradecieron a los que acompañaron el reclamo de justicia, y se comprometieron a “nunca bajar los brazos”.
“Por favor, nunca se olviden de Andrea Castana”.
Nadia y Macarena lanzan la frase y es imposible no pensar que pasaron ya dos años de aquel terrible 11 de marzo de 2015, cuando ‘La Flaca’ encaró un paseo al Cerro de la Cruz. Nunca bajó. No la dejaron. Fue emboscada, atacada sexualmente y estrangulada hasta morir.
“Estamos igual que hace dos años, pasó de todo pero menos justicia”. Así se refirió Nadia a la investigación del asesinato de Andrea. Sin embargo, esas palabras también tienen en eco en la familia Sánchez.
Dos años después, aún la justicia no puede definir si el fotógrafo fue asesinado o se suicidó, a pesar de que hay pruebas contundentes que avalan la hipótesis de un homicidio.
“El caso de ‘La Flaca’ sigue impune, y por eso estamos acá nosotros, para saber quién hizo lo que hizo y que pague por eso”, dijo Nadia. Y se refirió a la causa: “Sin novedades, sin culpables”.
“No nos alcanza con saber que se trabaja, exigimos que el responsable de buscar al culpable trabaje día y noche, que busque por cielo y tierra. Andrea merece justicia y su familia merece llegar a la verdad. Sólo así se podrá cerrar esta historia tan dolorosa”, agregó.
Fueron cotejados 15 ADN, pero todos los resultados dieron negativo. “Sigue pasando el tiempo y la posibilidad de llegar a la verdad se ve cada vez más remota”, afirmó Nadia.
Macarena, en tanto, aseguró que, “alguien que comparte esta ciudad con nosotros dispuso que a los 35 años la vida de Andrea se tenía que terminar”.
“Nos llena de impotencia sólo pensar lo que ella sufrió, y que la persona que se creyó con el derecho de decidir por ella hoy esté libre”, manifestó.
Y expresó un juramento que le hicieron a su amiga el día que la mataron: “Quienes amamos a Andrea vamos a seguir reclamando el esclarecimiento del caso. Le guste a quien le guste y le pese a quien le pese. Necesitamos justicia. Jamás vamos a bajar los brazos, y mientras Dios nos lo permita vamos a luchar para llegar a la verdad”.
“A Andrea la lloramos cada día y la extrañamos cada día. Merece que sigamos de pie marchando, gritando y exigiendo que llegue la verdad y eso sólo podemos hacerlo nosotros. Ella no tiene voz, se apagó hace dos años en este mismo lugar”, aseveró Macarena.
Al finalizar su discurso, juntas y con la voz quebrada por el llanto, Nadia y Macarena realizaron un pedido para todos: “Por favor, nunca se olviden de Andrea Castana”.
Un emotivo video repasó parte de la vida de Andrea a través de fotos y las diferentes acciones que se realizaron reclamando justicia. Después, 24 globos, uno por cada mes transcurrido desde el horrendo crimen, fueron lanzados al aire.
La jornada finalizó con una canción para conmemorar a Andrea. En ese momento, sus familiares se fundieron en un abrazo con sus amigas.
Dos años sin Hernán y sin respuestas
Los familiares de Hernán Sánchez acompañaron con infinito dolor una nueva marcha pidiendo justicia por Andrea Castana. Desde enero tomaron la decisión de no realizar movilizaciones, después de casi dos años de concentrar el día 13 de cada mes en el centro de nuestra ciudad.
La sociedad nunca acompañó este reclamo. La gente respondió con indiferencia y desprecio, el Estado municipal enviando a Seguridad Urbana y las fuerzas de seguridad ordenando la presencia de efectivos policiales durante estas acciones.
“Es algo tan duro pararse ahí en una esquina a mendigar justicia. Somos pocos y te das cuenta que a la gente le molesta, te miran con insulto”, relató Jesús Sánchez, padre de Hernán, a VillaNos Radio.
La familia Sánchez sintió el agotamiento y el desgaste de la exposición pública. Por lo tanto, este año no realizaron ningún acto de reclamo.
“El pueblo se olvida, se acostumbra. Es terrible, es durísimo y vos necesitas del otro, porque necesitas ese apoyo espiritual que se notó en la marcha por Andrea”, expresó Jesús.
Desde que denunciaron la desaparición de Hernán, la familia manifestó irregularidades en el desarrollo de la investigación y el manejo de la evidencia.
A dos años, el caso no tiene imputados y el cuerpo de Hernán permanece en la morgue.
La familia pide el cambio de carátula, solicitando que la muerte sea investigada como un homicidio. “Estas luchando contra una montaña que no la movés jamás. La causa está prácticamente frenada. No tuvimos ningún avance y aún no tenemos el cambio de la carátula”, advirtió el papá del joven.
La familia de Hernán apunta a un funcionario provincial por la muerte del fotógrafo, que habría sacado una foto comprometedora. “A Hernán le tendieron una cama y no descarto la posibilidad de que fueran policías los que lo mataron”, denunció Jesús.
Los familiares y amigos de Hernán desde el momento de su desaparición han realizado cortes de calles y marchas en toda la ciudad.
Actualmente, les cuesta venir de Tanti, el pueblo donde residen, a Carlos Paz, porque sospechan que aquí están los responsables de su muerte.
“Me pone mal venir, porque salís a la calle y capaz te cruzaste con el asesino en la terminal, en la municipalidad, en el colegio y no sabes dónde está”, reconoció Sandra Sánchez, hermana de Hernán. “Estamos totalmente desprotegidos. La sociedad debería tomar conciencia de que nadie está exento de nada”, enfatizó.
El paso del tiempo puede ayudar a romper el pacto de silencio de quienes tengan información sobre los dos casos, señaló Carlos Nayi, el abogado representante de ambas familias.
Sin embargo, para los Sánchez el tiempo sólo aumenta el dolor.
“Lo que me pasó con mi hijo es algo que no lo remedio jamás por nada, pero estamos en la lucha, pidiéndole a la justicia que redoble los esfuerzos necesarios para esclarecer el hecho y encontrar a los asesinos de Hernán”, declaró Jesús. Y remarcó: “Estamos mal, permanentemente juntos y sufrimos muchísimo. Es lo peor que te puede llegar a pasar en la vida. No me gustaría morirme sin saber quién mató a Hernán y por qué lo mataron”.
Impotencia, indignación, bronca y una sensación de total desamparo atravesaron a los presentes en ese acto de resistencia ciudadana contra el olvido que fue conmemorar los dos años sin Andrea Castana y sin Hernán Sánchez.
“Se nota esa ausencia de la gente que es como que no le importa el otro, es tristísimo. Le aconsejaría al pueblo que se acerque a estas cosas, que no las deje pasar y no olvide. Lo que me pasó a mí le puede pasar a cualquiera. Hay que reclamar y ayudar al otro”, concluyó Jesús.
Villa Carlos Paz necesita justicia por Hernán y Andrea. Estas dos familias se pusieron a la cabeza de un reclamo que es (o por lo menos debería ser) de una ciudad entera.
Hoy, a dos años, sus familiares y amigos luchan y luchan por mantener viva su memoria. Reclamando justicia. Exigiendo justicia. No los dejemos solos.
Nota correspondiente a la edición n° 457 del semanario La Jornada, del 19 de marzo de 2017.
