Tras permanecer más de dos semanas desaparecida, este jueves personal de Gendarmería Nacional dio con el paradero de Jaqueline Charlet, la mujer de 30 años que faltaba de su casa en Córdoba desde el 25 de agosto. La muchacha que era intensamente buscada por familiares y amigos fue hallada en una vivienda de la ciudad bonaerense de Lomas de Zamora.
La principal hipótesis sobre su repentina desaparición apuntó a una red de trata de personas, por lo que el caso pasó de la Justicia Provincial a la Federal, quien tiene competencia en este tipo de delitos.
Según señalaba su propia madre, Jaqueline tiene un retraso mental, que a pesar de su edad intelectualmente tiene una madurez de un niño de 10 años. Aprovechándose de esta situación y de su necesidad de trabajo, la mujer habría sido engañada por una banda vinculada a la trata.
Luego de una exhaustiva investigación que incluyó seguimientos y escuchas telefónicas, Jaqueline fue encontrada en compañía de un hombre que quedó detenido por Gendarmería.
Patricia Messio, responsable de la Secretaría de Asistencia y Prevención de la Trata de Personas, manifestó que hay elementos fuertes para creer que se trataba de una red de explotación sexual.
“La persona detenida tiene antecedentes y hay muchos indicadores que muestran que esto se trató de un caso de trata de personas (…) Había indicadores claves en cuanto a la captación, el estado de vulnerabilidad, las llamadas telefónicas… indicaban un alerta importante”, sostuvo Messio.
La mujer se encontraría en buen estado pero aún no pudo comunicarse con sus familiares. Una vez que Jaqueline sea traslada a Córdoba, se le brindará la contención necesaria y declarará ante el fiscal federal Enrique Senestrari, quien tipificará legalmente el caso.
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