Un sentimiento de orfandad inunda el corazón de superhéroes como Spider Man, Thor, Iron Man y hasta el increíble Hulk. Y no sólo de estos personajes, sino de millones de seguidores alrededor del mundo.
Stan Lee, ese escritor y editor de cómics que traspasaron el papel y llegaron al cine convirtiéndolo en un personaje de culto, además de un millonario, murió hoy a sus 95 años.
Un eterno adolescente, Lee se encargó de participar en cameos de sus películas y videojuegos. Después de todo, era un actor que nunca se animó a traspasar verdaderamente el papel.
Sus ideas lo mantuvieron entretenido y divertido a lo largo de su carrera. Disney le pagaba un millón de dólares mensuales de jubilación a modo de agradecimiento por sus creaciones.
El genio de Marvel murió en California dejando un legado infinito que ahora Disney deberá cuidar. Después de todo, fue el mismo Lee a través del tío Ben quien inmortalizó la frase: “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”