Después de la reunión de comisión General del Concejo de Representantes que tuvo lugar pasado este mediodía, quedó más que claro que la propuesta no tiene consenso. Ni hacia afuera, ni hacia adentro.
Los escasos cambios que se esbozaron desde el avilescismo (por ejemplo pasar la fecha del referéndum del 30 de octubre al 20 de noviembre) no alcanzaron para reunir las voluntades necesarias.
Un relevamiento realizado por La Jornada da cuenta que el proyecto avilescista tiene apenas cinco votos a favor asegurados (los incondicionales Alejandra Roldán, Mirtha Alessio, Carla Livelli, Soledad Zacarías y Hugo Bustos). En tanto, no lo acompañarán Walter Gispert, Gustavo Molina y Oscar Sequeira (CPU-Frente Cívico), Natalia Lenci (UCR), Laura Orce (PJ) y Omar Ruiz (CPU). El edil del PRO, Marcelo Cuevas, expresó que aún no tiene tomada una decisión.
Cabe recordar que para ser aprobado, el proyecto necesita contar con ‘mayoría agravada’. Esto es, dos tercios de las 12 bancas (ocho votos).
En la práctica, Avilés no tuvo ni siquiera los votos suficientes para presentar un despacho por mayoría (siete). Por eso, y ante la posibilidad cierta de sufrir una fuerte derrota, la opción fue no incluir el proyecto en el orden del día de la sesión de mañana.
Jaqueado por un gobierno en pleno declive y las denuncias que lo involucran personalmente y a algunos familiares y estrechos colaboradores con el escándalo de corrupción en el cuartel de Bomberos Voluntarios de Villa Carlos Paz, Avilés se enfrenta a una dura encrucijada. Y nadie puede predecir cuál será la estrategia para mantenerse a flote. Su supervivencia política está en juego.