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El negocio de los matafuegos en los bomberos, bajo un manto de sospecha

Bomberos - área matafuegos (2)El negocio de venta y service de matafuegos fue creado en 2001/2002 en el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Villa Carlos Paz.

La idea fue generar ingresos para poder cubrir el costo operativo mensual del cuartel ya que la comisión directiva de aquel entonces decía no contar con los fondos económicos (a pesar de los subsidios y bonos contribución) para pagar esos gastos.

La condición impuesta por el cuerpo activo fue que la administración del negocio y el manejo del dinero estuviera a cargo de los propios bomberos, con el jefe como responsable.

Así funcionó durante varios años. El negocio superó las expectativas, la población elegía comprarle a los bomberos a modo de colaborar con la institución y el dinero tenía el destino que correspondía, siendo completamente transparente su administración.

En 2008 la comisión directiva viendo los dividendos que generaba este negocio decidió quitarle la administración a los bomberos, con el argumento de que por ley no podían manejar dinero.

A partir de ese momento no se pudo saber cuánto recaudaba el negocio de matafuegos ni mucho menos qué destino se le daba al dinero.

Según se cuenta, habrían comenzado a contratar personas externas al cuartel quitándoles a los bomberos una posible fuente de trabajo.

El emprendimiento se fue deteriorando paulatinamente, haciendo trabajar al personal que carga los matafuegos en condiciones deplorables (aun al día de la fecha), y pagándole comisiones muy favorables a los vendedores que no pertenecen al cuartel.

Así se fueron perdiendo clientes y el negocio que lleva el nombre de ‘Bomberos Carlos Paz’ está hoy prácticamente en ruinas, abriendo sus puertas apenas cinco horas por día de lunes a viernes, cubriendo solo el service y carga de matafuegos ya que ni siquiera pueden seguir vendiendo nuevos por las deudas contraídas con los proveedores.

También existe un manto de sospecha sobre la persona que reparte los matafuegos, sobre todo en lo que hace al uso de la cartera de clientes de la institución.

Como un reflejo de la polémica por los bonos contribución de la que dimos cuenta en la edición del domingo pasado de La Jornada, trascendió que la comisión directiva tendría intenciones de desprenderse del negocio de matafuegos entregándoselo a un tercero a cambio de un porcentaje, situación que lejos está del espíritu original de este emprendimiento que fue soportar con sus utilidades el costo operativo del cuartel que hoy ronda los 70 mil pesos mensuales.

Mientras salen a la luz situaciones como la de los matafuegos o los bonos contribución, sigue su camino en la justicia, aunque con escaso avance, la denuncia formulada por el cuerpo activo contra la actual comisión directiva por el presunto manejo irregular de fondos de la institución.

 

Nota correspondiente a la edición n° 429 del semanario La Jornada, del 14 de agosto de 2016.

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