Familias y organismos de seguridad reportan en las últimas semanas casos de captación de menores a través de la plataforma Roblox; especialistas recomiendan reforzar controles parentales, denunciar ante autoridades y revisar las configuraciones de chat y privacidad.
En las últimas semanas se multiplicaron las denuncias por grooming y captación de menores a través de Roblox, la popular plataforma de videojuegos en línea. Padres y organizaciones locales denunciaron que adultos logran entablar contacto con niños dentro del juego, trasladan las conversaciones a aplicaciones de mensajería y, en algunos casos, solicitan o intercambian material con contenido sexual.
Especialistas en protección infantil advierten que los predadores utilizan tácticas de engaño y manipulación: construyen confianza ofreciendo regalos virtuales o roles dentro del juego, fomentan la confidencialidad y, paso a paso, normalizan el contacto fuera de la plataforma. Por eso insisten en que no alcanza con controles básicos: se necesita supervisión activa y medidas técnicas combinadas con diálogo y educación familiar.
¿Qué pueden hacer los padres y cuidadores?
- Revisar y ajustar la privacidad: poner las cuentas en modo privado, desactivar chats con desconocidos y limitar mensajes a contactos verificados.
- Supervisar la actividad: conocer qué juegos usan los hijos, con quién interactúan y con qué frecuencia; pedir los nombres de usuario y revisar sesiones de juego.
- Hablar con los niños: establecer reglas claras sobre no compartir fotos, datos personales ni encuentros presenciales; explicar señales de riesgo.
- Guardar evidencia: si hay indicios, conservar capturas de pantalla, nombres de usuario y registros de conversación.
- Denunciar: radicar la denuncia en la comisaría o fiscalía especializada y reportar los usuarios a la plataforma.
- Buscar ayuda profesional: contactar servicios psicológicos y jurídicos para acompañamiento en caso de daño.
Las señales de alerta incluyen cambios de conducta, secretismo con los dispositivos, recepción de regalos virtuales inesperados y nuevos contactos en apps de mensajería. Si un menor muestra resistencia a hablar sobre su actividad online o evita que los adultos revisen su pantalla, es motivo para indagar y actuar.
A nivel internacional, crece la presión para que las plataformas infantiles refuercen la moderación, apliquen controles de edad verdaderamente eficaces y respondan con mayor rapidez a los reportes. Mientras tanto, especialistas y organizaciones recomiendan combinar herramientas técnicas con supervisión y diálogo familiar para reducir riesgos.
Si detectás una situación de grooming o sospecha de captación, actuá de inmediato: preservá la evidencia y presentá la denuncia ante las autoridades competentes y ante la misma plataforma. La prevención y la reacción rápida son claves para proteger a los niños.
