“¿Qué vamos a votar?”, se preguntó Sansone en un comunicado. Y ensayó una respuesta: “¿si el servicio de agua es bueno o es malo?; ¿si el precio de agua es caro o razonable?; ¿si las obras se hicieron sin autorización o sin control?; ¿si la capitalización es legal, o es ilegal?; ¿si nos caen más simpáticos algunos que otros?; ¿si municipalizamos el servicio de cloacas o no municipalizamos el servicio de cloacas?; ¿si municipalizamos el servicio de agua o municipalizamos todos los servicios públicos?; o simplemente municipalización o Coopi, como propone el Frente Cívico. Y nada menos que dentro de un año.
¿Alguien puede imaginarse adónde habrá llegado este conflicto dentro de un año?
Ni tampoco dentro de 60 días como propone el ejecutivo, pues el tiempo es exiguo”.
En este punto, advirtió: “Cómo saber qué votar si la mayoría de la gente no conoce la problemática que encierra este conflicto.
Cómo saber qué votar si ni siquiera está claro qué nos van a preguntar. Si son tantas las preguntas sin respuesta. Y además nadie parece estar dispuesto a contestarlas.
Cómo decidir si no sabemos cuáles son las diferencias y las coincidencias entre las partes, si nunca se sentaron a dialogar. Ni unos ni otros lo hicieron, solo se pasaron años entre agravios y descalificaciones mutuas”.
Por eso, sostuvo que, “antes de llegar a un referéndum, la sociedad toda tiene el derecho a ser informada e informarse. Y el deber de discutir qué es lo mejor para la ciudad antes de tomar decisiones que no tienen retorno”.
“Antes que el referéndum deben convocar a la comunidad a un amplio debate social, político y económico”, enfatizó, y consideró que, “quienes deben resolver este conflicto, pues para eso están, parecen no querer o no poder hacerlo”.
“Sin el debate, sin el conocimiento necesario de la sociedad, están obligándonos a decidir por ellos el resultado de una vulgar riña de gallos”, concluyó.