Las lluvias de las últimas horas provocaron un importante aumento del caudal de ríos y arroyos en distintos sectores de las serranías cordobesas.
Después de una sequía larguísima que parecía no tener fin, las crecientes se convirtieron, por un lado, en una bendición para las necesitadas cuencas, en nuestro caso, la del lago Sam Roque; y por otro, en un auténtico espectáculo para vecinos y turistas que, celular en mano, buscaban una buena ubicación para registrar el fenómeno de la mejor manera.






De acuerdo a lo informado este viernes por la secretaría de Gestión de Riesgo del gobierno de la provincia, el río San Antonio verificó esta tarde un pico de crecida 3,3 metros en Cuesta Blanca que, un rato más tarde, se puedo apreciar en Villa Carlos Paz donde se clausuraron al tránsito el puente Terzi de Playas de Oro y, obviamente, el vado del balneario El Fantasio al que corresponden los videos que acompañan este informe.




Recomendaciones
Desde la secretaría de Gestión de Riesgo se remarcó la importancia de tener en cuenta las recomendaciones de las autoridades, seguir las indicaciones de la cartelería y del personal desplegado en la zona (bomberos, policía, efectivos de Defensa Civil y bañeros), evitar acampar cerca de ríos y arroyos, y estar atentos al nivel de los cursos de agua durante y después de las tormentas.
Para tener en cuenta
Para reconocer cuándo se aproxima la crecida de un río, hay que observar si hay nubarrones en las zonas altas: puede ser un indicio de que está lloviendo en las cercanías.
Si el agua cambia de aspecto –pasa de ser cristalina a oscura– traslada objetos como ramas y palos, entre otros, o de a poco tapa piedras que antes estaban visibles, todo indica que está llegando el pico de una creciente.
El nacimiento de los ríos serranos se produce en las partes altas de las montañas. Esto significa que si bien en las zonas donde se encuentra el grueso de los balnearios o paradores el día puede estar soleado y agradable, en las cuencas altas es posible que esté lloviendo. Por eso es importante estar atento a los medios que brindan información inmediata sobre alertas meteorológicas por tormentas severas.
En caso de presentarse una tormenta repentina, hay que alejarse del agua y de los márgenes, ya que de forma rápida e imprevista el río puede crecer a causa de la lluvia caída o por la apertura de válvulas de diques y embalses.
Además, no se deben cruzar vados o puentes tapados por la correntada del agua, aunque parezca que puedan atravesarse sin peligro.