La Agencia Internacional para la Investigación sobre Cáncer (IARC), dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), está estudiando la posibilidad de revaluar en 2016 la eventual relación entre algunos tipos de cáncer y la ingesta regular de mate caliente, ante los pedidos de expertos y productores de Argentina y Uruguy.
La conclusión de ese trabajo estableció que la planta del mate por si sola pertenece a la categoría “Grupo 3”, es decir “no cancerígena para los humanos”, pero el mate caliente se clasificó en la categoría “Grupo 2A”, es decir “probablemente cancerígeno a humanos”.
No obstante, Loomis aclaró que “la clasificación se basó en limitada evidencia en humanos” de que beber mate caliente está asociado a la aparición del cáncer de boca y esófago.
El miércoles pasado un grupo de expertos se reunieron en Montevideo para pedirle a la OMS que considere revisar o actualizar la clasificación que ubica al mate en la lista de alimentos a su probablemente cancerígenos.
A su vez, ayer hubo un encuentro similar en la Legislatura de Misiones donde directamente se pidió la exclusión de la lista y se resaltó los innumerables los beneficios de la infusión como sus efectos antioxidantes y anti inflamatorios.
Télam